La naturaleza nos brinda inteligentemente lo que nuestro cuerpo necesita. Las frutas y verduras de nuestra tierra son un regalo, y los avances tecnológicos nos han permitido no solo disfrutarlo en su estación propia, sino durante todo el año.

A grandes rasgos las frutas se suelen clasificar entre las más comunes (peras, manzanas, naranjas, mandarinas, plátanos, melocotones), las exóticas (guayabas, kiwis) y aquellas con propósitos específicos, como el kiwi por su conocida funcionalidad para ayudar a la digestión. Pero hay una que tiene un gran reconocimiento en el mundo de la pérdida de peso: la piña.

La piña es una fruta tropical que es una fuente de triptófano, un aminoácido que contribuye a la producción de melatonina, lo que favorece la relajación. Además es una gran fuente de vitamina C. ¿Es recomendable cenar piña para descansar mejor? Puede ser una excelente idea. Además, es baja en calorías, rica en fibra, deliciosa y se adapta perfectamente a dietas para perder peso. Se digiere con facilidad, lo que es beneficioso para un sueño reparador, y también posee propiedades antioxidantes que contribuyen a una piel radiante.

Para introducirla en tus platos en fácil, ya que combina bien prácticamente con todo. Una buen opción es incorporarla en ensaladas frías o templadas con pollo o con atún, con arroz o con ensalada de patata. Si buscas algo más sofisticado, una brocheta de langostinos y trozos de piña es una opción excelente, y si quieres incorporarla en un zumo saciante y saludable, queda perfecta con manzana y zanahoria.