Los hechos tuvieron lugar en torno a las cinco y media de la madrugada y los dos hombres, hermanos, fueron puestos ya a disposición judicial este fin de semana. La policía llevaba días recibiendo llamadas de posibles robos en el Parque Grande.

Aprovechaban la oscuridad de la noche y realizaban todos los robos de madrugada. Algunos de estos hurtos se denunciaron en quioscos en la parque baja del parque y otras junto al monumento de Alfonso el Batallador, en la parte alta tras subir las escaleras del parque.

Fuentes oficiales de la Policía Nacional confirmaban estos robos así como la detención de los presuntos culpables. Los ladrones aprovechaban que algunos de estos quioscos están en obras para robar parte de la maquinaria.

Tras ser detenidos, los agentes descubrieron que en el maletero de su vehículo llevaban taladros, radiales, y otros utensilios de obra que los trabajadores dejaban en una zona del quiosco y que empezaron a denunciar que iban ‘desapareciendo’.

PRECEDENTES DE ROBOS CON VIOLENCIA

En el Parque José Antonio Labordeta, conocido como Parque Grande, se habían producido con anterioridad algunos robos con violencia e intimidación, protagonizados por grupos de jóvenes, varios de ellos menores de edad.

Casi todos estos delitos han tenido lugar de madrugada dentro del espacio abierto del parque, siendo denunciados de inmediato por las víctimas. Muchos de estos autores fueron detenidos por la Policía Local y Nacional momentos después de los avisos.