Eran los propios vecinos de la calle Pignatelli quienes, en torno a las doce del mediodía de hoy, llamaban al 091 explicando que un individuo estaba amenazando con un cuchillo a familias con niños y golpeando señales en la vía pública.

Hasta ocho vehículos de Policía Nacional y Local se personaban en la calle y procedían a reducir a esta persona que, en ese momento, golpeaba señales con una cadena de metal y ya había roto varios cristales en vía pública.

Esta historia, según fuentes oficiales de la Policía Nacional, comenzaba mucho antes, en uno de los pisos ocupados del número 76 de la calle Pignatelli, que los vecinos llevan meses denunciando por insalubridad, desorden público y por ‘pinchar’ la luz de una farola cercana.

Era la asociación ‘Calles Dignas’ quien denunciaba este hecho que, como decimos, comenzaba horas antes en un piso ocupado de este calle. Al parecer, y según fuentes oficiales, unos ocupas de este número 76 invitaban a otra persona que no tenía donde dormir a que se quedase en su piso ocupado.

A las horas de este encuentro se habría producido una discusión entre ellos y el «invitado» había amenazado a la pareja que le había invitado a quedarse con un cuchillo. Momentos después, había salido a la vía pública produciendo los ya mencionados incidentes. Tanto esta persona como uno de los okupas del piso habrían sido detenidos por la Policía Nacional.

UNA NUEVA PELEA Y VECINOS SIN LUZ

Desde ‘Calles Dignas’* denuncian además que varios bloques de la calle Pignatelli y otros de calles cercanas se habrían quedado momentáneamente sin luz. Lo achacan, según esta asociación, a los continuos empalmes de la luz en este bloque, el número 76, de la calle Pignatelli.

A pesar del cierre de dos bloques ocupados en los últimos meses por parte del Ayuntamiento de Zaragoza, los vecinos siguen denunciando la inseguridad producida por otros edificios que permanecen ocupados sin que se ponga remedio alguno. «Hemos solicitado su lanzamiento y una cita con Delegación de Gobierno pero no hemos obtenido respuesta», insisten desde ‘Calles Dignas’.