La Dirección General de Tráfico (DGT) intensifica su campaña de control vial con motivo de la operación salida de las Navidades en España. A pesar de que muchos conductores ya han emprendido sus viajes, aún se esperan centenares de miles en las carreteras para celebrar la Nochevieja. La DGT no da tregua, utilizando tanto radares móviles como vehículos camuflados para garantizar el cumplimiento de las normas viales.
A diferencia de los radares fijos, los móviles presentan limitaciones en la detección de diversas infracciones. Por esta razón, la DGT emplea vehículos camuflados, especialmente diseñados para vigilar el correcto uso del teléfono móvil y el respeto de los límites de velocidad. Estos vehículos, mayormente furgonetas, se distinguen por sus modelos frecuentes, como las Ford Transit Custom, Renault Master o Fiat Scudo, y llevan consigo una cámara en el techo para verificar el comportamiento del conductor.
Sin rótulos ni distintivos exteriores, la identificación de estos vehículos camuflados recae en un detalle clave: la matrícula. Todas las unidades de Tráfico llevan las siglas «PGC» (Parque de la Guardia Civil) en la matrícula. Además, algunos de ellos cuentan con cristales tintados, dificultando su identificación visual desde el exterior.
Un consejo para reconocerlos en el momento preciso es observar la presencia de dos agentes de la Guardia Civil uniformados y con chaleco reflectante en el interior de la furgoneta. Esta señal confirma de manera inequívoca que se trata de un vehículo de Tráfico, aunque esta revelación puede llegar demasiado tarde para algunos conductores.
Además de los tradicionales métodos de control, la DGT ha incorporado recientemente radares de obra para garantizar la seguridad en zonas de construcción. Estos radares, anunciados como medida preventiva, buscan reducir los riesgos de accidentes en estas áreas, sancionando a quienes excedan los límites de velocidad establecidos.
La implementación de estas nuevas medidas refleja el compromiso de la DGT con la seguridad vial y la protección tanto de conductores como de trabajadores en las carreteras españolas.