Los patinetes eléctricos no pueden ser ingresados al transporte público. Renfe advirtió que esta medida “está basada en criterios de salud pública y de seguridad de los viajeros y es similar a otras producidas en distintas ciudades de España y de Europa”. Sin embargo, hay una manera de que puedas entrar con ellos sin ser penalizado ni incluir las normas: utilizar una bolsa de transporte. Puedes utilizarlo por la calle y, cuando tengas que hacer un viaje más largo, ir en transporte público tranquilamente con el patinete guardado en la bolsa.
Los patinetes eléctricos son una opción de micromovilidad muy elegida en este último tiempo, incluso desplazando al transporte público a un segundo plato. Funcionan impulsados por un motor eléctrico y alimentados por una batería recargable. Son vehículos compactos, ligeros y diseñados para realizar viajes cortos en áreas urbanas y suburbanas. ¿Tienes que ir a una zona relativamente cercana y no tienes ganas de esperar el bus? Aquí tienes la solución definitiva para evitar esperas y no llegar nunca tarde.
Su éxito radica es que son muy fáciles de utilizar y tienen una increíble capacidad para evitar el tráfico y llegar a su destino de manera eficiente.
Composición de los patinetes eléctricos
En líneas generales, los patinetes eléctricos se componen de los siguientes elementos:
-Motor eléctrico. La potencia del motor puede variar dependiendo del modelo del que estemos hablando, pero suele ser suficiente para velocidades moderadas en áreas urbanas.
-Batería recargable. La autonomía también cambia según el modelo que tengamos delante y la velocidad a la que conduzcamos el aparato. La batería aguanta viajes cortos y medianos.
-Manillar y plataforma. Su manillar permite al conductor controlar la dirección y dispone de una plataforma en la que el conductor puede apoyar los dos pies.
-Frenos y acelerados. Los patinetes eléctricos suelen contar con frenos de disco o de tambor para que la detección sea segura 100%. La aceleración se controla por un acelerador de puño o un gatillo en el manillar.
-Plegabilidad. Este punto es precisamente en el que permite que podamos “saltarnos” la norma del transporte público. Muchos patinetes eléctricos son plegables, haciendo fácil su transporte y almacenamiento. Se convierten así en opciones excelentes para combinar con otros medios de transporte o llevarlos contigo cuando no los vayas a utilizar de manera inmediata.
Bolsa de transporte para patinetes eléctricos
Como te comentamos antes, los patinetes eléctricos en teoría no pueden subirse al transporte público, pero nadie te impide guardarlos en una bolsa y sacarlos cuando llegues a destino. Hemos encontrado esta pieza en Amazon, con una correa de transporte ajustable para el hombro y un asa para transporte.
Fuente: amazon.es
Este modelo ha sido diseñado para Xiaomi M365, aunque puede utilizarse para scooters diferentes o patinetas de dimensiones similares. Ha sido confeccionada con material impermeable Oxford 1680D. Podrás transportarla fácilmente en el manillar del patinete con logo reflectante para obtener un plus de seguridad cuando empiece a bajar el sol. El material empleado en su fabricación protege el scooter eléctrico de cualquier daño.
La correa de transporte ajustable se utiliza sobre el hombro de manera independiente para ayudar a colocar el patinete en el interior de la funda con mayor seguridad, evitando molestias al ingresarlo en la bolsa. Fue pensada para ser transportada de un lugar a otro, así que tienes ante tus ojos un artículo que te durará mucho tiempo, además de cumplir perfectamente con su función. Tamaño: 117 x 40 x 20 cm. Su precio es 32,95 euros.
En conclusión, los patinetes eléctricos pueden transportarse de un lugar a otro con bolsas de transporte como estas, reiterando su condición de movilidad sostenible, eficiente y práctica.