La gastronomía española es una de las más destacadas a nivel mundial, celebrada tanto por los propios españoles como por los visitantes internacionales que se deleitan con sus sabores auténticos y variados.
Desde los aromas tentadores de la paella valenciana hasta el reconfortante calor de las patatas a la riojana, pasando por los exquisitos pinchos del País Vasco, España ofrece un universo culinario rico en diversidad y tradición.
Sin embargo, en cualquier cultura gastronómica, existen platos que no logran conquistar todos los paladares. Es aquí donde entra TasteAtlas, una plataforma especializada en la exploración y valoración de la gastronomía mundial, que ha elaborado una lista que pone de manifiesto los platos españoles menos apreciados, con el inusual bocadillo de sardinas liderando el primer puesto.
La renombrada guía turística y gastronómica TasteAtlas ha desvelado su selección de las 97 comidas españolas peor valoradas, entre las cuales se encuentran algunos de los íconos culinarios más emblemáticos y arraigados del país.
Para confeccionar esta lista, TasteAtlas se basó en las valoraciones proporcionadas por su audiencia, recopilando un total de 16.367 opiniones, de las cuales 12.925 fueron validadas por el sistema hasta el 16 de marzo de este año.
Entre los platos destacados que figuran en esta lista se encuentran el arroz al forn en el puesto 10, la menestra de verduras en el 13, el conejo al ajillo en el 29, la mojama en el 38, la merluza a la gallega en el 50, los boquerones fritos en el 55, el arroz con leche en el 66 y el cocido madrileño en el 71.
Estas son solo algunas de las delicias populares que, según los criterios de TasteAtlas, no lograron satisfacer completamente las expectativas culinarias.
Como se mencionó anteriormente, el primer lugar de esta lista poco convencional lo ocupa el bocadillo de sardinas, con una modesta puntuación de 1.7 sobre 5. Este plato, aunque es un clásico en la cultura gastronómica española, no parece conquistar los corazones de los críticos gastronómicos ni de los paladares más exigentes.
El segundo puesto de los peores platos típicos españoles lo ocupa las peladillas, un dulce navideño valenciano, con una puntuación de 2.2 sobre 5. Estas pequeñas delicias, elaboradas a base de almendras confitadas, son una tradición arraigada en la Comunidad Valenciana, especialmente en lugares como Casinos y Alcoy, aunque no parecen haber conquistado completamente el gusto de los degustadores.
Pero la lista de los menos apreciados no termina ahí. Sorprendentemente, el tercer y cuarto lugar lo ocupan el caldo de papas típico de Canarias y el gazpacho de mango, una peculiar variante de la famosa sopa fría andaluza.
Otros platos que, para sorpresa de muchos, no alcanzaron la popularidad esperada entre los turistas incluyen la paella catalana, la fideuá y la fabada asturiana, esta última especialmente conocida y celebrada en la región de Asturias. A pesar de su arraigo y reputación local, estos platos parecen no haber logrado destacar en el ámbito internacional según las valoraciones recopiladas por TasteAtlas.
Estos resultados, aunque pueden ser desconcertantes para muchos amantes de la cocina española, reflejan la diversidad de gustos y preferencias en el ámbito culinario, demostrando que incluso los platos más venerados pueden no ser del agrado de todos los comensales.