Ubicada al noreste de la provincia de Zaragoza, la comarca de Cinco Villas es un lugar estratégico, emplazado cerca de Huesca y Navarra, y a medio camino entre Cataluña y País Vasco. Esta ubicación hace que sea un buen destino para pasar la Semana Santa. Tradición, patrimonio y naturaleza son sus atractivos para unas fechas en las que no faltan los actos llenos de devoción.

Estas propuestas, propias de la Semana Santa, se dan en numerosos pueblos de las Cinco Villas. En Biel, tiene mucha tradición el anochecer del Viernes Santo, poco antes de la procesión del Santo Entierro, cuando se subastan los pasos que luego lucen en la procesión. Esta fiesta está declarada de Interés Turístico, igual que la Semana Santa de Ejea de los Caballeros y de Tauste.

Otros ejemplos curiosos son la procesión del Silencio, de El Frago, donde los vecinos recorren las calles portando las imágenes totalmente callados. Destaca también la celebración del lavatorio de los pies a los Apóstoles, encarnados por vecinos de los municipios de Sádaba y Luesia.

El Jueves Santo por la mañana, en Sos del Rey Católico se entona el ‘Canto de la Pasión’. En este acto, doce vecinos de la localidad encarnan a los Apóstoles y salen a las calles para recrear las últimas horas de la vida de Jesús. La representación va desde el momento en el que acude al Huerto de los Olivos a orar hasta la Última cena, para terminar con su crucifixión y muerte.

PROPUESTAS NATURALES EN LAS CINCO VILLAS

Además de los actos propios de la Semana Santa, las Cinco Villas ofrecen otras alternativas turísticas de las que se puede disfrutar todo el año y también en estas fechas. Entre los encantos naturales de la comarca está la Sierra de Santo Domingo, declarada Espacio Natural Protegido por el Gobierno de Aragón en el año 2015.

Se trata de un enclave privilegiado para realizar rutas de BTT o de senderismo, recorridos aptos para todas las edades y condiciones físicas que se pueden descargar en la web comarca.

Otro de los alicientes de la comarca es perderse en alguno de los muchos paisajes singulares. Un total de 857 enclaves naturales cuentan con esta calificación, concedida por el Gobierno de Aragón por su gran calidad, belleza, impacto visual y respeto medioambiental.

Pígalo, en la zona de Santo Domingo; San Bartolomé, en Biota; el conocido como mirador de las Cinco Villas; los montes de Castejón de Valdejasa; los aguarales de Valpalmas o las Bardenas Reales son algunos de estos paisajes singulares que merece la pena conocer de cerca.

Pero la comarca no ofrece solo singularidades naturales, sino que también es conocida por el yacimiento arqueológico de Los Bañales, en donde habrá visitas guiadas los días 28 y 30 de marzo (a las 10.30 horas). Las impulsa la Fundación Uncastillo, en colaboración con la comarca, y tendrán un coste de 6 euros por persona. Los beneficios se revierten en nuevas campañas de excavación. No hace falta reservar, sino acudir directamente al yacimiento a la hora indicada.

Toda la información sobre la comarca está presente en las oficinas de turismo comarcal, situadas en Sos del Rey Católico, Uncastillo, Ejea de los Caballeros, Sádaba, Tauste y Luesia, además de la oficina de turismo de la DPZ, ubicada en el torreón de Navardún.