En un emocionante anuncio durante la Feria Internacional de Turismo de Fitur, Alsa reveló hoy su proyecto estrella: el «Expreso de Canfranc». Este tren turístico, que operará entre las estaciones de Sabiñánigo, Jaca y Canfranc, promete ser una experiencia única para los viajeros que deseen explorar la belleza del Camino de Santiago francés.

Con tres frecuencias diarias por sentido, el trayecto incluirá paradas en Sabiñánigo, Jaca, Castiello, Villanúa y Canfranc. A lo largo de aproximadamente una hora, los pasajeros tendrán la flexibilidad de subir o bajar en cualquiera de las estaciones a lo largo del recorrido, gracias a las diversas opciones de billetes ofrecidas.

Lo más destacado de este proyecto es el patrimonio histórico ferroviario que representa el convoy. Compuesto por una locomotora de la Serie 316 de los años 50 y coches viajeros de los años 30, este tren, declarado como patrimonio histórico, promete llevar a los pasajeros en un viaje nostálgico. Además, en ocasiones especiales, contará con coches de la Compañía Internacional de Coches Camas, añadiendo un toque de elegancia a la experiencia.

Con el apoyo institucional del Gobierno de Aragón, la Mancomunidad del Alto Valle del Aragón y la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, el proyecto cuenta con aliados como la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y la empresa Auxiliar de Patrimonio Ferroviario. Estos colaboradores han contribuido con su valioso patrimonio ferroviario para hacer posible la restauración y puesta en marcha del «Expreso de Canfranc».

El recorrido escénico, destacando el valle del Río Aragón como protagonista, proporcionará acceso a la restaurada Estación Internacional de Canfranc, ahora transformada en un hotel. Además de ofrecer a turistas y montañeros una forma sostenible de llegar a Canfranc, el proyecto busca impulsar el inicio de rutas pirenaicas sin depender del transporte particular.

Alsa, reconocida por su experiencia en trenes turísticos, agrega el «Expreso de Canfranc» a su exitoso historial, que incluye el Tren de Felipe II. Este último, que conecta Madrid y San Lorenzo de El Escorial, forma parte de la marca Trenes Patrimonio Mundial, promovida en colaboración con la Fundación de los Ferrocarriles Españoles y la Comunidad de Madrid desde 2017.