La fachada del conocido restaurante de comida rápida McDonald’s en el Coso de Zaragoza ha experimentado un cambio significativo en los últimos días: se han instalado unas estructuras metálicas en forma de triángulo en la entrada, lo que ha generado controversia entre los repartidores de comida a domicilio, comúnmente conocidos como ‘riders’, que frecuentemente utilizan ese espacio para descansar mientras esperan sus pedidos.

UNA MEDIDA POLÉMICA

Estos triángulos metálicos no son decorativos ni promocionales; su propósito es claro: evitar que los ‘riders’ se sienten en los bordillos frente al establecimiento. Esta medida ha sido vista por muchos como una forma de arquitectura hostil que busca desalentar la presencia de repartidores en la zona, afectando directamente a quienes dependen de estos espacios para descansar entre entregas.

Antes de la instalación de estas estructuras, los bordillos del McDonald’s del Coso servían como un lugar de descanso para los ‘riders’. Muchos de ellos han expresado su descontento y frustración con la situación. Muchos de ellos trabajan largas horas y aprovechan las esperas de sus pedidos para descansar, sobre todo, las piernas aquellos que se mueven en bicicleta por la ciudad.

Los ‘riders’ señalan que esta medida es exclusiva del McDonald’s del Coso y que no sucede, por ejemplo, en el McDonald’s del paseo de Sagasta donde pueden sentarse libremente.

McDonald's Coso

CONDICIONES LABORALES

Con la nueva medida, los repartidores de plataformas como Uber Eats y Glovo se ven obligados a esperar de pie o a traer sus propias sillas para poder descansar. Esta situación ha generado un debate sobre las condiciones laborales de los ‘riders’ y la responsabilidad de las grandes cadenas de comida rápida en proporcionar un entorno mínimo de comodidad para quienes colaboran en su cadena de distribución.

La instalación de estas estructuras metálicas en la fachada del McDonald’s del Coso ha generado indignación entre los ‘riders’, quienes sienten que se les está privando de un espacio esencial para su descanso en medio de largas jornadas laborales. Mientras tanto, la discusión sobre la dignidad y el trato justo hacia estos trabajadores continúa.