Fernando Bolea, leyenda del balonmano aragonés, fallecía a los 59 años tras una enfermedad. Bolea fue uno de los grandes jugadores que ha dado Aragón, conquistando Copas del Rey, Copa Asobal y Copa de Europa con el Bidasoa de Irún. También disputó los Juegos Olímpicos de Barcelona’92 y los Mundiales de Suecia’93 y de Islandia’95.

Destacó en Corazonistas y su carrera profesional estuvo marcada por su paso por el Bidasoa Irún, dónde conquistó la Liga Asobal, la Copa del Rey, la Copa Asobal y la Copa de Europa, siendo uno de los jugadores españoles más destacados del momento. 

En 1999 volvió a la capital aragonesa y fichó por el Garbel Zaragoza. Se pasó a los banquillos en 2003 con el conjunto zaragozano y pronto llegarían los éxitos. En 2005 consiguió ascender a la Liga Asobal quedando segundo en la División de Honor B pero no continuó en la máxima categoría.

Pasó por Guadalajara, logrando también el ascenso y posteriormente también estuvo entrenando en Italia y de nuevo en España. Numerosas personalidades del deporte han querido darle el último adiós y también la Federación Española de Balonmano.

Día triste para el balonmano español. Se nos marcha antes de tiempo, a los 59 años, Fernando Bolea, un ilustre representante de la familia aragonesa que hizo de nuestro deporte una forma de vida, tanto en la pista como en los banquillos. Gracias por todo Fernando, dejas un importante legado”, escribía la federación. 

También Jorge Azcón lamentaba su perdida. “Nos deja un gran referente del balonmano aragonés y una gran persona.Todo mi cariño para los familiares y amigos de Fernando Bolea. Descanse en paz”.