Ya es oficial: el Gobierno británico ha anunciado que la megaplanta de baterías de Tata Motors aterrizará en Inglaterra y, por tanto, no se instalará en Aragón. Distintos medios británicos, entre los que se encuentran la BBC o The Telegraph, ya adelantaban la noticia de que el grupo indio, propietario de Jaguar Land Rover, se llevará su inversión millonaria a Somerset. Hay que recordar que el gigante asiático ya cuenta con una importante factoría de vehículos en la localidad inglesa de Coventry.

La fábrica de baterías va a suponer una inversión multimillonaria con la que está prevista la creación de hasta 9.000 empleos que no se generarán en la Comunidad. El proyecto, como ha indicado el Gobierno del Reino Unido, supone que Tata Motors invertirá 4.000 millones de libras, es decir, más de 4.600 millones de euros según el cambio actual.

Además de la gigafactoría, se trata de una oportunidad para crear un ecosistema en torno a ella para la fabricación de componentes de coches eléctricos, una aspiración que podría haber significado no sólo la continuidad, sino la potenciación de la ya de por sí significativa industria de la automoción en la provincia de Zaragoza.

La BBC destacaba que se trata de la mayor inversión en tierras británicas desde los años 80, cuando la nipona Nissan se implantó en la zona de Sunderland. Según dicho medio, para la elección de Tata Motors ha sido crucial la ayuda de cientos de millones de libras que recibirá por parte del gobierno del Reino Unido. De hecho, se estima que estas podían rondar los 500 millones de libras, algo menos de 600 millones de euros.

La noticia salta después de que, hace unos días, la vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos española, Nadia Calviño, asegurara en Zaragoza que tras reunirse en la India con responsables de Tata todavía veía posibilidades de que la planta se instalara finalmente en la Comunidad.

Este es el segundo jarro de agua fría que Aragón se lleva después de que, hace unas semanas, se confirmara que la fábrica de baterías del Grupo Volkswagen, al que también se aspiraba, aterrizará finalmente en la localidad valenciana de Sagunto. A este respecto, las críticas a la gestión del Gobierno de España no se han hecho esperar y el candidato del Partido Popular al Congreso por Zaragoza, Pedro Navarro, ha acusado a Calviño de «engañar» a los ciudadanos con estos proyectos que se han esfumado.