Un equipo de buzos de la alianza Nippon Foundation-Nekton Ocean Census está llevando a cabo una fascinante misión de cuatro semanas en las aguas de Tenerife. Su objetivo: descubrir y proteger la vida marina antes de que el calentamiento global amenace con la extinción de algunas especies.
Las aguas costeras del archipiélago canario son conocidas por su rica biodiversidad, pero incluso científicos locales se sorprenden con los primeros hallazgos del equipo. Anna Vesanen, bióloga marina de la organización, destaca la importancia de conocer a fondo las especies marinas para protegerlas adecuadamente. Admite que aún sabemos muy poco y que es posible que existan especies desconocidas o al borde de la extinción.
Buzos profesionales se sumergen diariamente a profundidades de hasta 50 metros en los puntos más ricos en biodiversidad. Perry Brandes, uno de los buzos, explica que explorarán cuevas en busca de esponjas y tomarán muestras de rocas y algas para estudiar a fondo, en la esperanza de descubrir nuevas especies.
Tenerife cuenta con dos taxónomos de renombre internacional, Leopoldo Moro y Jesús Ortea, quienes han dedicado sus vidas a explorar y describir las maravillas submarinas. Moro ha descrito alrededor de 200 nuevas especies, pero su compañero Ortea ha elevado esta cifra a impresionantes 977 especies en medio siglo.
El proceso de investigación es meticuloso: las muestras recopiladas se etiquetan con información detallada sobre la fecha, temperatura y ubicación de la toma. Estas se transfieren a bandejas para mantener viva la fauna marina. La casa de Moro se ha convertido en un laboratorio donde Carmen Hernanz, colaboradora del taxónomo, examina minuciosamente las muestras bajo un microscopio de alta potencia, revelando un mundo oculto entre los granos de arena y las piedras.
Cada nuevo hallazgo es fotografiado y catalogado antes de pasar a la opinión experta de Jesús Ortea, cuyo vasto conocimiento del medio marino de la Macaronesia es insuperable. El trabajo de estos exploradores submarinos no solo revela la asombrosa diversidad del océano en las costas de Tenerife, sino que también destaca la importancia de conocer y preservar este frágil ecosistema antes de que sea demasiado tarde.