El recetario español puede presumir de tener una gran variedad de platos para todo tipo de paladares. Desde lo más sencillo como las tapas hasta los tradicionales guisos, o platos más elaborados y laboriosos como la paella, que es uno de esos platos que poca gente sabe cocinar realmente bien.

Este plato típico de la cocina española es uno de los más consumidos en el país. Tiene su origen en la costa Valenciana, y fuera de las fronteras de su comunidad muchos cometen los errores más típicos a la hora de prepararlo.

NO COMETAS ESTOS ERRORES AL COCINAR PAELLA

Uno de los errores más comunes que se cometen al preparar una paella es el uso incorrecto del arroz. La paella auténtica requiere un tipo específico de arroz: el arroz de grano corto, como el arroz bomba. Este arroz tiene la capacidad única de absorber el caldo sin deshacerse, proporcionando esa textura característica y deliciosa que distingue a una paella bien hecha.

Otro error que suele cometerse es el exceso de ingredientes. Es tentador añadir una gran variedad de carnes y mariscos a la paella, pero el éxito de este plato reside en su simplicidad. La paella tradicional valenciana lleva pollo, conejo, judías y garrofón, pero todo en su justa medida, sin excesos.

Revolver el arroz durante la cocción es otro error común que puede arruinar una paella. Este gesto puede provocar una textura pastosa y poco apetecible. La técnica correcta consiste en distribuir uniformemente el arroz sobre la superficie de la paellera y luego dejar que se cocine sin intervenir, permitiendo que cada grano absorba los sabores del caldo.

Finalmente, uno de los detalles más auténticos de una paella es el «socarrat», una capa crujiente de arroz tostado que se forma en el fondo de la paellera. Lograr el socarrat perfecto requiere paciencia y precisión en el control del calor. Es el sello de autenticidad de una paella bien hecha y un testimonio del dominio del cocinero sobre su arte.