Habían estado bebiendo unas copas por la zona de la Universidad y entablaron, por motivos desconocidos, una discusión. En un momento dado, uno de ellos, de cerca de 40 años de edad, sacó un cuchillo y se lo clavó en el cuello al otro.

Un testigo presencial de los hechos avisó inmediatamente a emergencias y a la Policía Nacional. No tardaron en llegar a la zona varias patrullas que localizaron al agresor y lo detuvieron minutos después.

El acusado lleva desde entonces en prisión preventiva por intento de homicidio, a la espera de un juicio que se iba a celebrar esta mañana en la Sala Primera de la Audiencia Provincial de Zaragoza. Ha sido trasladado hasta los juzgados por agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional y tan solo ha estado allí media hora.

La secretaria de la sala ha llamado a la defensa y a fiscalía porque en la sesión de hoy faltaba alguien importante: la víctima. Este hombre, de origen argelino, salió a los dos días de ingresar del Hospital Clínico de Zaragoza donde le curaron las heridas del cuello y prácticamente desapareció del mapa.

La Policía Nacional ha intentado localizarlo desde entonces pero se cree incluso que haya podido salir del país. Así las cosas, y ante la ausencia del perjudicado, la vista ha durado apenas treinta minutos, con un acuerdo entre las partes, muy favorable para el acusado, con antecedentes penales.

CASI CINCO AÑOS DE REBAJA EN LA PENA

Al final el presidente de la sala ha dictado la sentencia en base al acuerdo entre las partes: tres años y medio de prisión con el atenuante del alcohol y las drogas principalmente. Son casi cinco años menos de los 8 que inicialmente pedía fiscalía.

Un acuerdo, que para la abogada encargada de su defensa, ha sido muy positivo para su cliente que en todo momento ha estado conforme, como no podía ser de otra manera, con la sentencia del juez.