Si planean viajar a Suecia, es necesario tomar extrema precaución. El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación ha emitido una recomendación para los españoles que tengan intenciones de visitar Suecia, en vista de la reciente elevación del nivel de riesgo de ataques terroristas en ese país.

La actualización de las recomendaciones de viaje, publicada en la página web del Ministerio, informa que «las autoridades suecas han revaluado la posición de Suecia de ser un objetivo terrorista ‘legítimo’ a un objetivo ‘prioritario’, lo que aumenta la posibilidad de ataques en el país. Por lo tanto, se insta a extremar la vigilancia y precaución».

Precisamente hace pocos días, los servicios de seguridad suecos elevaron el nivel de alerta antiterrorista en la nación. Suecia, anteriormente en el nivel tres de un total de cinco, ha sido elevada al nivel cuatro, indicando un alto riesgo de posibles atentados.

Aunque las instituciones no han dado detalles específicos sobre los motivos de este cambio, tanto el Servicio de Seguridad (SAPO) como las Fuerzas Armadas han enfatizado que se basa en un análisis a largo plazo y más amplio, en lugar de un hecho aislado. La jefa de la SAPO, Charlotte von Essen, destacó que este cambio de nivel se debe a una consideración integral de la situación.

No obstante, Charlotte von Essen mencionó algunos factores que han influido en el incremento del riesgo: la ofensiva militar de Rusia en Ucrania y las campañas de desinformación. En las últimas semanas, Suecia también ha sido objeto de atención debido a la quema de ejemplares del Corán, lo que ha llevado a críticas políticas y manifestaciones desde naciones de mayoría musulmana. Hace poco, incluso Al Qaeda emitió un comunicado instando a llevar a cabo ataques en el país escandinavo.

SUECIA: UN PAÍS TRANQUILO QUE EXPORTA TERRORISTAS A SIRIA E IRAK

Durante mucho tiempo, Suecia ha sido reconocido como un Estado democrático y pacífico, sirviendo como refugio seguro para aquellos que buscaban escapar de los conflictos. De hecho, ha sido país receptor de refugiados en las últimas décadas, especialmente de los países de Oriente Medio como Siria e Irak.

De hecho, incluso los jóvenes provenientes de familias sirias o iraquís que encontraron protección en este país están mostrando un cambio preocupante en su actitud hacia él, según manifiestan organismos públicos suecos. Por ejemplo, hay zonas y barrios concretos que se les ha registrado la etiqueta de «vulnerables», según la terminología de la policía sueca indica una ruptura del orden legal y social, entre otros aspectos, dando lugar a la emergencia de una sociedad paralela. Es decir, una zona donde la sharia, la ley islámica más estricta, es la que predomina y donde la Policía y el Estado no entra por miedo.

La situación incluso se ha vuelto más compleja. Recientemente, según un informe oficial del gobierno sueco, más de 300 individuos islámicos han abandonado Suecia para unirse a los combates en Siria e Irak, convirtiendo al país en uno de los principales exportadores per cápita de yihadistas en Europa.