El ambiente festivo ha invadido las calles de Jaca en el día de hoy, marcando el primer viernes de mayo conmemorando una fecha histórica: la Batalla de la Victoria. Este año, con una retransmisión de la festividad en dos grandes pantallas por primera vez, en la plaza de la Catedral y la del Marqués de la Cadena, la ciudad ha podido celebrar el 1.264 aniversario de este hito, una gesta bélica para conmemorar la victoria de las huestes del Conde Aznar Galíndez sobre los musulmanes y que sigue siendo motivo de orgullo para los jacetanos.

La fiesta ha estado marcada por dos novedades: por un lado, la despedida de Miguel Carasol, que desde desde 2015 daba vida al conde Aznar (el personaje central del desfile) y al que por el momento no le han encontrado sustituto. Y por otro la de Lucía Guillén, concejal del Ayuntamiento jacetano por Aragoneses y que este año era nombrada síndico de la fiesta. Ella ha sido de hecho la protagonista del saludo de banderas al portal la bandera de Jaca en el desfile, la figura más importante que representa a la ciudad en este día.

El desfile ha contado con la participación de unos 800 componentes de las diferentes escuadras (Artesanos y Artesanas, Labradores y Labradoras, Caballería, Cortejo Histórico y Cortejo del Conde). Una fiesta que fue declarada por la Secretaría de Estado de Turismo como Fiesta de Interés Turístico Nacional en 2020, un título honorífico que se otorga a fiestas o acontecimientos de valores culturales y tradición popular con indudable atractivo turístico

El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha estado presente en la celebración y ha sido invitado Cada primer viernes de mayo la ciudad revive la batalla y cientos de ciudadanos se visten con trajes de la época para participar en un desfile multitudinario.

Foto: Ángel Fernández Pardo

Una de las figuras más destacadas de esta festividad es el Conde Aznar Galíndez, cuya victoria sobre las tropas musulmanas es recordada con fervor. Este año, Miguel Carasol encarnará al Conde por última vez después de diez años liderando las huestes victoriosas. Para Carasol, este momento está lleno de emociones, ya que marca el fin de una era en la que ha contribuido al fortalecimiento y la difusión de esta celebración.

La renovación de figuras clave, como el Conde Aznar y los capitanes de las escuadras, cada ocho años, es una tradición establecida por la Hermandad del Primer Viernes de Mayo en 2015. Esta medida busca garantizar la continuidad y la frescura de la festividad, involucrando a nuevas generaciones en su organización y desarrollo.

Este año, una novedad destacada ha sido la instalación de dos pantallas para seguir el desfile desde las plazas de la Catedral y Marqués de la Cadena. Esta iniciativa busca brindar una mejor experiencia a los espectadores y fomentar la participación de todos los asistentes, incluso aquellos que no pueden acceder al recorrido completo del desfile.