El nuevo contrato del transporte sanitario urgente adjudicado a Ambulancias Tenorio ya está en funcionamiento pero no está siendo recibido con una buena acogida por el medio rural. Las críticas se disparan desde las organizaciones sindicales y los usuarios por el elevado número de incumplimientos de los pliegos aprobados por el Gobierno saliente de Javier Lambán. Entre otras cosas, faltan vehículos nuevos, no están previstos desplazamientos nocturnos de las ambulancias o las bases operativas para las guardias no son localizadas.
Desde CSIF insisten que cerca del 80% de las bases operativas presenciales no están listas a tiempo. Otro sindicato, Cooperación Sindical, detalla que de los prometidos helicópteros nocturnos «no hay ni uno y no los va a ver». Por lo que en caso de emergencia nocturna, no habrá un servicio de atención al paciente en las zonas rurales más alejadas.
Esta planificación sanitaria puede ocasionar graves problemas de salud para una persona que tenga un infarto de noche o en un municipio donde haya una alta demanda de pacientes en algún momento concreto. Por esta situación de desorden y de nula gestión, así como por las condiciones de los trabajadores, el sector del transporte de servicio urgente está en huelga desde el 16 de enero de este año 2023. Siguen reclamando mejores condiciones y, al menos, que tengan una renovación de un convenio colectivo que caducó en 2019.
En este momento, y según explica el gobierno aragonés de Javier Lambán, Ambulancias Tenorio tiene a día de hoy 90 vehículos rotulados y equipados por toda la Comunidad y que se activan desde el Centro Coordinador de Urgencias en función de las necesidades de un paciente y con criterios de gravedad, proximidad y disponibilidad. Sin embargo, fuentes sindicales confirman que es falsa la afirmación del Gobierno aragonés.
Uno de los aspectos que más critican es que en las situaciones de 24 horas de guardia nadie ha comunicado a la plantilla dónde deben ir a comer o cenar o si deben hacerse cargo de las comidas. Sobre la falta de vehículos nuevos, faltan 19 de los totales que son 4×4 para destinos en donde los traslados son adversos por el firme de la carretera o las condiciones metereológicas.
Cooperación Sindical también recriminó la empresa no ha proporcionado a los trabajadores la ropa de alta visibilidad. Así como que a los enfermeros de las bases de la UVI se les ha ofrecido continuar su labor en el Servicio Vital Básico (SVB) pero como técnicos en emergencias.
SIN AMBULANCIAS
La portavoz de Sanidad del PP en las Cortes de Aragón, Ana Marín, ha afirmado este jueves que el nuevo servicio de transporte sanitario ha comenzado con «promesas incumplidas«. Marín ha apuntado que en algunos pueblos de las tres provincias «esta noche no han tenido ambulancias», mencionando los casos de Orihuela del Tremedal y Alcorisa, en Teruel; Lafortunada y Benabarre en Huesca; y Caspe, Utebo y Borja en Zaragoza.
Tampoco están construidos los helipuertos anunciados en las comarcas, ha añadido, que además «no son al uso habitual», porque para aterrizar de noche deben contar con una serie de condiciones que «a fecha de hoy no se han cumplido«, de forma que «se ha puesto en riesgo la salud y la seguridad de todos los aragoneses». La parlamentaria del PP también ha criticado que «no hay bases», pese a que el Gobierno de Aragón anunció que el servicio pasaba de ser localizado a presencial.
Así, ha anotado que a los técnicos de emergencias sanitarias de Valderrobres (Teruel) «se les mandó a casa porque no tenían dónde dormir»; y en Huesca «les han mandado a dormir a la sala de costureras del hospital psiquiátrico».
Asimismo, ha expresado que los vehículos que utiliza la empresa adjudicataria son «viejos, los que ha desechado en Andalucía», los 4×4 «no han llegado», y «no llevan ecógrafos, los respiradores son de baja calidad, las tomas de oxígeno no funcionan y las neveras de la medicación se han congelado» en Huesca, Monzón y Monreal del Campo.