Los padres de los alumnos de la escuela de Caneto, en el municipios oscense de La Fueva, han solicitado una reunión con la consejera de Educación del Gobierno de Aragón, Claudia Pérez Forniés, para evitar su cierre y que los 21 niños y niñas no tengan que trasladarse a diario al colegio de Tierrantona, ubicado también en la Comarca de Sobrarbe.

El portavoz de los padres de alumnos, Eduardo Juvert, ha explicado que han remitido, vía telemática, la petición de reunión con la consejera de Educación para «regularizar la escuela y estar dentro del marco de la ley», después de que hayan recibido la comunicación, «vía telefónica», del cierre de la escuela, tras llamar a la director del centro de Tierrantona.

En declaraciones a Europa Press, Juvert ha informado de que el pasado mes de septiembre solicitaron una entrevista, pero «se hizo caso omiso y, ahora, en lugar de acudir a la Dirección Provincial de Educación en Huesca hemos tramitado vía telemática en el registro esta petición de reunión».

El objetivo, ha incidido el portavoz, es «regularizar la escuela que hemos pedido desde que se abrió hace cinco años», aunque ha reconocido que hay aspectos que no están terminados a nivel legal y «cuesta resolverlos en el ámbito administrativo».

«Los responsables actuales –ha lamentado– no han querido ofrecer una solución para ambas partes, sino que han decidido lo que hay que hacer sin preguntar». En este sentido, ha manifestado la decepción que existe entre los padres de los niños, aunque ha asegurado que son optimistas y tienen «ganas» de seguir luchando para regularizar la situación de la escuela.

SUBSANAR DEFICIENCIAS

Ha abogado por subsanar las deficiencias o carencias administrativas para mantener a los escolares, porque «no tiene sentido trasladar 21 niños a 40 minutos de sus casas todos los días por una carretera estrecha y llena de curvas, a la que se suma la nieve y el hielo en invierno».

El principal asunto a solventar es el catastral, ya que la escuela ‘O Chinebro’ se ubica en un terreno cedido por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) en un suelo calificado de rústico, si bien el Ayuntamiento de Tierrantona, en un pleno celebrado hace un año, aprobó recalificarlo de urbanizable para que pudiese albergar el colegio, pero «hasta que se registre como tal en el Catastro se tarda una media de dos años», ha comentado Eduardo Juvert.

Del mismo modo, ha indicado que el equipamiento educativo tiene «todos» los servicios y abastecimientos necesarios, como la energía procedente de placas solares que hace «autosuficientes a los más de 50 habitantes de Caneto», además dispone de red de abastecimiento de agua e internet.

Desde su creación hace cinco años, ha recibido el apoyo del Ayuntamiento de Tierrantona y de la Comarca de Sobrarbe. «También hemos hablado con la Dirección Provincial de Educación en Huesca, que nos apoyaron y analizaron todo para que la escuela siguiera adelante», ha apuntado.

Juvert ha insistido en que la finalidad es «evitar» el cierre porque «no es viable trasladar 21 niños, de 3 a 11 años de Infantil y Primaria, todos los días fuera de su casa».

Por último, ha remarcado que es necesario concienciar sobre el apoyo a la escuela rural y la España despoblada «y eso se hace con infraestructuras». «La ley es la ley, y hay que saber aplicarla a cada situación», ha apelado.