La Consejera de Cultura, Educación y Turismo del Ayuntamiento de Zaragoza, Sara Fernández, visita la redacción de HOY ARAGÓN para detallar la línea que seguirá la consejería para los proyectos que hay encima de la mesa en el futuro cultural de Zaragoza.

Entre ellos, la posibilidad de tener un nuevo pabellón multiusos similar al WiZink madrileño, del cada vez más cercano Festival de la Luz y de otro de los proyectos innovadores, como es el Distrito 7.

PREGUNTA. En esta nueva legislatura pretenden impulsar grandes proyectos innovadores como el Distrito 7, en la antigua fábrica de Giesa. ¿Qué espera de este proyecto? ¿cuál es su finalidad?

RESPUESTA. Uno de los pilares estratégicos dentro de la política cultural de este equipo de Gobierno es el apoyo al sector audiovisual. El Distrito 7 lo que busca es crear un centro para las artes audiovisuales y también una parte también para el folklore y las tradiciones. Pero la parte más innovadora es la creación de un plató físico y un plató virtual, que ofrezca unas condiciones diferentes a las que hay ahora mismo en otros platós a lo largo de España. También queremos crear una zona de coworking y otra de archivo filmográfico de la filmoteca de Zaragoza. Es decir, todo un espacio donde los audiovisuales puedan desarrollarse a nivel teórico y a nivel de aprendizaje, pero también a nivel empresarial.

Uno de los grandes anuncios en campaña del Partido Popular fue la apuesta por un Festival de la Luz en la Plaza del Pilar. 100 días después de ser Gobierno, ¿qué puede contar de este proyecto?

Es algo en lo que estamos trabajando y que requiere mucho tiempo y tenemos que ver también dónde lo hacemos. La plaza del Pilar es uno de los epicentros culturales en Zaragoza. Toda la oferta cultural la queremos englobar y que todo el mundo sepa, más allá de los zaragozanos, que tenemos un escenario donde ocurren cosas a lo largo de todo el año, que es la plaza del Pilar. Y una de las cosas que queremos que ocurran, ya veremos dónde, será ese Festival de las Luces, pero tardaremos un poco en verlo.

El Ayuntamiento en campaña prometió la construcción de un pabellón multiusos al estilo WiZink de Madrid para celebrar conciertos y grandes eventos. Una propuesta que ya ha tenido el rechazo de todos los grupos de la oposición, incluido VOX.

Es un espacio que viene a completar la oferta que se hace en Zaragoza a nivel cultural, lúdica y que también puede tener otro tipo de de utilidades. Esta oferta trata de generar espacios y de traer una programación que de otra forma no vendría a nuestra ciudad, porque hay una oferta que se hace a nivel nacional con programación para la mayor parte de los días del año que de otra forma no vendría a Zaragoza.

Con la propuesta del Wizink, ¿Zaragoza no tiene exceso de equipamientos relacionados con la cultura? Principe Felipe, Auditorio y Sala Multiusos, la Nueva Romareda, Vive Latino, Espacio Zity…

El Príncipe Felipe es un espacio deportivo. Da la casualidad de que tiene muy buena acústica y por eso se hacen ahí conciertos pero realmente no es un espacio preparado a nivel cultural. La oferta es complementaria, los espacios tienen distintas capacidades y distintos servicios y, de hecho, que podamos aceptar y absorber esa parte del Wizink demuestra la capacidad que tenemos para absorber congresos y eventos profesionales. Realmente tenemos muchas infraestructuras diferentes y a veces incluso se ocupan todas.

Se dice que la ciudad de Goya es Zaragoza pero, ¿se puede hacer algo más para reivindicar la figura del pintor en su ciudad?

Sí, desde luego estamos alineados tanto Ayuntamiento de Zaragoza como Gobierno de Aragón en impulsar la celebración del bicentenario de Goya en el 2028. Puede parecer lejano, pero es un proyecto ambicioso que vamos a liderar desde Zaragoza, desde Aragón, que es la tierra de Goya y la ciudad donde vivió hasta los 29 años. A partir de ahí se hará de la mano del resto de entidades públicas y privadas que tienen que ver con la obra y con la vida de Goya formen parte de una plataforma con la que impulsemos estas celebraciones que van a tener un carácter internacional.

¿Cómo se le puede dar la vuelta al Vive Latino para atraer a más público nacional e internacional? Porque parece que casi todo el público es de Zaragoza.

Hay que tener en cuenta que llevamos solo dos ediciones y que el Vive Latino en México tiene casi 30 años. Es verdad que es un proyecto que tiene que seguir aposentándose, que tiene que seguir teniendo esa marca internacional y, desde el Ayuntamiento de Zaragoza, con el impulso de turismo, vamos a hacer que se atraiga más a ese público, aunque los hoteles estaban todos llenos. Eso implica que la gente que viene no solamente es de Zaragoza.

Zaragoza todavía no tiene un gran impulso cultural como si tiene Madrid, Barcelona, Málaga o Bilbao. ¿Hay opciones de traer algún museo de referencia internacional?

Es una línea en la que ahora mismo no estamos trabajando porque, de hecho, tenemos otros museos pendientes de hacer, como es por ejemplo el Museo de la Semana Santa. Tenemos la obra de Goya como centro de referencia. Creo que ahora mismo, más allá de exposiciones temporales que han venido a esta pasada corporación, no se está trabajando en ese sentido y es verdad que tampoco somos una ciudad con tanto turismo y con tanto visitante internacional para que esas cifras cuadraran.

Azcón como candidato a la alcaldía prometió el museo de la Semana Santa ¿sería muy descabellado que Zaragoza tuviera un museo de la Corona de Aragón?

No, en nuestro programa electoral hay un centro de interpretación de la Corona de Aragón, o sea, que vamos a trabajar en eso también. No es descabellado, al revés.

Las Fiestas del Pilar están al caer y cada vez hay más programación, ¿qué espera de estas fiestas?

Que vuelvan a ser lugar de encuentro, que yo creo que es algo muy importante, que las vivamos en la calle como nos gusta a los a los zaragozanos, que volvamos a estar con nuestros familiares, con nuestros amigos. El año pasado ya empezamos a cambiar el modelo a un modelo descentralizado que tiene 48 escenarios que están en todos los barrios de Zaragoza con algún tipo de programación. Por tanto, son fiestas de ciudad, que es lo que tienen que seguir siendo.