Zaragoza en su apuesta por la innovación tecnológica, quiere convertirse en la mayor zona de pruebas de innovaciones tecnológicas de Europa con la aprobación de la nueva Ordenanza Sandbox.

Esta iniciativa, encargada a expertos de la Universidad de Zaragoza por el Área de Presidencia del Ayuntamiento de Zaragoza, tiene como objetivo brindar seguridad jurídica a las empresas que deseen poner a prueba la viabilidad técnica de sus proyectos antes de su comercialización o implementación a gran escala.

La Ordenanza sandbox representa un paso significativo hacia el futuro, buscando posicionar a Zaragoza como líder en innovación y tecnología, así como facilitar la llegada de proyectos innovadores, inversiones y talento a la ciudad.

Entre sus objetivos destacados se encuentra la simplificación de trámites administrativos para proyectos de innovación, la adaptación de la normativa municipal a los avances técnicos y tecnológicos urbanos y la coordinación eficiente entre diversas áreas de Gobierno.

En lo que respecta a los plazos, según fuentes municipales consultadas, la ordenanza permanecerá hasta el 20 de diciembre en el periodo de información previa para la presentación de reclamaciones y sugerencias. Se espera que pueda ser aprobado el proyecto en enero por el Gobierno de Zaragoza y posteriormente en el pleno en febrero-marzo. Después vendrá el periodo de alegaciones y la previsión es que pueda entrar en vigor a mediados del 2024.

Fuentes municipales resaltan el éxito de Zaragoza en los últimos años como referente en innovación, movilidad autónoma, tecnología y emprendimiento en España. La ciudad ha atraído proyectos sostenibles de energía verde, contribuyendo a la creación de urbes tecnológicamente avanzadas y comprometidas con la sostenibilidad ambienta.

Estas mimas fuentes recalcan, que estos proyectos «no solo generan empleo cualificado y desarrollo económico, sino que también promueven inversiones que mejoran la calidad de vida de los habitantes de Zaragoza«, enfatizando la importancia de «ofrecer condiciones atractivas, seguridad jurídica y regulación adecuada para garantizar el desarrollo óptimo y seguro de proyectos tecnológicos».

Empresas como los robots repartidores de Goggo ya han elegido a Zaragoza para probar sus proyectos, junto con iniciativas como el puerto de aterrizaje y despegue vertical para drones de reparto proyectado en el parking Sur de la Expo, que ocuparía una superficie de en torno a 7.500 metros cuadrados, permitiría probar unidades destinadas al reparto de mercancías y el transporte de personas y, según explicaron desde el Consistorio, reportaría un canon anual de 14.094 euros a las arcas públicas.

Estas decisiones estratégicas buscan convertir a Zaragoza en un epicentro de proyectos «sostenibles» que contribuyan a la organización, creatividad e inclusividad de la ciudad mediante la tecnología. Además, refuerza el compromiso del Ayuntamiento de Zaragoza de seguir avanzando en la dirección de consolidar la ciudad como un entorno propicio para la innovación tecnológica.