Casademont Zaragoza jugó hace dos semanas en el Gravelines Sportica, uno de los recintos más míticos del baloncesto francés que ayer fue devorado por las llamas, causando conmoción en la ciudad francesa.
Tal y cómo informaron ayer las autoridades francesas, el fuego se originó por un fallo eléctrico en una piscina contigua y el conjunto francés tendrá que disputar sus partidos en otra pista ya que será necesaria una total reconstrucción. Las llamas se han extendido rápidamente y han calcinado el pabellón, en el que Casademont perdía por la mínima hace unos días.
“Ya no hay sala de baloncesto, todo se ha esfumado”, afirmó el presidente del club Gravelines, Christian Devos. “Cuarenta años de vida en Sportica se han esfumado”, añadió.
El conjunto aragonés quiso mandar un mensaje de ánimo a su rival en la FIBA Europe Cup tras el incendio de su pabellón.
En estos momentos, Gravelines Dunkerke es el líder del Grupo M de la FIBA Europe Cup tras ganar los dos partidos. Los de Fisac son segundos, tras conseguir una victoria y caer en suelo francés. El próximo partido europeo será en enero frente al Manisa en Turquía.