El Real Zaragoza prepara el choque frente al Eibar de este sábado con el objetivo de volver a ganar tras el palo del empate en Gijón frente al Sporting de Gijón. Para este partido ya se espera la presencia de Cristian Álvarez, después de perderse los últimos dos partidos por lesión. 

Poussin fue el gran protagonista en los últimos dos partidos, con acciones que le costaron puntos al conjunto aragonés. Especialmente llamativo fue el fallo contra el Sporting de Gijón, cuando el sportinguista Pablo Insua (ex del Huesca), que se había quedado detrás del francés, le robó el balón y supuso el empate en el tiempo añadido.

El vestuario apoya al futbolista tras el error clamoroso que sufrió en El Molinón, incluso Fran Escribá reconocía que “a mis hijos los defenderé siempre. Mi primera obligación es ayudar a Poussin, apoyarle. Había hecho un partido muy serio y muy bueno, había estado muy seguro en un campo con mucho centro lateral. El vestuario es muy sano y muy bueno y es un tío muy querido, un chico excelente y espectacular. La sensación de los compañeros es la misma que la mía, apoyarle”. 

La idea principal del cuerpo técnico es que ya vuelva este mismo sábado Cristian Álvarez, incluso pudo estar en Gijón si el choque hubiera sido trascendental, pero no se quiere correr ningún resto con el argentino. 

El veterano guardameta es pieza clave en el Real Zaragoza, por eso no se ha arriesgado nada con su presencia en los últimos partidos. Fue frente al Andorra, cuando tuvo que retirarse en el minuto 82 del partido tras sufrir una microrotura a nivel de la musculatura isquiosural de su pierna izquierda. 

Se espera que vaya completando los entrenamientos al mismo ritmo que sus compañeros y si todo va normal, su presencia ante el Eibar es segura.