Desde antes del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, Cataluña ha presenciado una fuga de empresas considerable. En el año del ‘procés’, bajo la presidencia de Carles Puigdemont en la Generalitat, 1.863 empresas abandonaron Cataluña, mientras que solo 546 se establecieron.

Esto resultó en una pérdida neta de 1.317 empresas. En total, durante los últimos seis años, más de 8.000 empresas han dejado Cataluña, representando ventas de más de 56.000 millones de euros, según datos de Informa D&B.

Por ello, el reciente acuerdo firmado entre PSOE y Junts que allana el camino de la amnistía de los condenados por el procès independentista no calma las aguas de la economía y la empresa catalana.

Las empresas que trasladaron sus sedes a otros territorios en los últimos años no aprecian que el clima de inseguridad jurídica y tensión política se rebaje con la amnistía. Fueron varias empresas del Ibex 35, incluyendo bancos, concesionarias de autopistas, textiles, biofarmacéuticas, gestoras de fondos y aseguradoras las que se trasladaron principalmente a Madrid, aunque algunas optaron por la Comunidad Valenciana o Aragón.

Banco Sabadell fue la primera entidad en anunciar su partida a Alicante, seguido por CaixaBank, que se mudó a Valencia. Entre otras que tomaron la ruta hacia Madrid se encuentran Gas Natural Fenosa (Naturgy), Abertis, Inmobiliaria Colonial y Cellnex.

En el mercado continuo, compañías líderes como Applus, Dogi, Cementos Molins, Service Point Solutions, la biofarmacéutica Oryzon y EDreams, entre otras, también eligieron abandonar Cataluña.

Fuera del mercado de valores, empresas líderes en sus sectores, como Codorníu, que se mudó a Haro (La Rioja), y el Grupo Planeta, forman parte de la larga lista de más de 8.000 empresas que han cambiado su sede social.

En el sector asegurador, Catalana Occidente, VidaCaixa, Divina Pastora Seguros y MGS Seguros se trasladaron a diferentes destinos, incluyendo Valencia y Zaragoza. Del mismo modo, empresas de fondos, financieras, salud, alimentación y turismo, como Banca Mediolanum, DVD Dental, Bimbo, Gallo, y la cadena hotelera Hotusa, también se marcharon.

Este panorama plantea una pregunta fundamental: ¿volverán estas empresas a Cataluña? El acuerdo entre el PSOE y Junts no alivia la tensión empresarial y la decisión de regresar dependerá de varios factores, como la estabilidad política y económica de la región que, según las fuentes económicas citadas, no auguran que esto se produzca.

Todo apunta a que las empresas que salieron de Cataluña por el procès seguirán en sus refugios económicos como Aragón, Madrid o la Comunidad Valenciana, entre otros.