El movimiento del núcleo interno de la Tierra ha sido un tema de debate en la comunidad científica durante dos décadas. Investigaciones anteriores sugerían que el núcleo interno giraba más rápido que la superficie del planeta. Sin embargo, un reciente estudio de la Universidad del Sur de California (USC) proporciona evidencia clara de que, alrededor del año 2010, el núcleo interno comenzó a disminuir su velocidad, moviéndose más lentamente que la superficie de la Tierra.

John Vidale, profesor decano de Ciencias de la Tierra en la Facultad de Letras, Artes y Ciencias Dornsife de la USC, comentó sobre el hallazgo: «Cuando vi por primera vez los sismogramas que insinuaban este cambio, me quedé perplejo. Pero cuando encontramos dos docenas de observaciones más que señalaban el mismo patrón, el resultado fue ineludible. El núcleo interno se había desacelerado por primera vez en muchas décadas. Otros científicos han defendido recientemente modelos similares y diferentes, pero nuestro último estudio proporciona la resolución más convincente.»

LA RELATIVIDAD DE ACELERAR… Y RETROCEDER

El núcleo interno, compuesto de hierro y níquel, está rodeado por el núcleo externo líquido de los mismos elementos. Aproximadamente del tamaño de la Luna, el núcleo interno se encuentra a más de 4.828 km bajo la superficie de la Tierra.

Este componente de nuestro planeta presenta un desafío significativo para los investigadores, ya que no puede ser visitado ni observado directamente. En su lugar, los científicos utilizan las ondas sísmicas generadas por los terremotos para crear representaciones del movimiento del núcleo interno.

El estudio, realizado por Vidale y Wei Wang de la Academia de Ciencias de China, utilizó formas de onda y datos de terremotos repetidos. Estos terremotos repetidos son eventos sísmicos que ocurren en el mismo lugar y producen sismogramas idénticos, lo que permite una comparación precisa a lo largo del tiempo.

Los investigadores compilaron y analizaron datos sísmicos registrados alrededor de las Islas Sandwich del Sur de 121 terremotos repetidos que ocurrieron entre 1991 y 2023. Además, utilizaron datos de pruebas nucleares soviéticas gemelas entre 1971 y 1974, así como repetidas pruebas nucleares francesas y estadounidenses de otros estudios del núcleo interno.

Según Vidale, la desaceleración del núcleo interno fue causada por la agitación del núcleo externo líquido que lo rodea. Este movimiento genera el campo magnético de la Tierra y está influenciado por los tirones gravitacionales de las densas regiones del manto rocoso suprayacente. «La interacción entre el núcleo externo líquido y el núcleo interno sólido, junto con las fuerzas gravitacionales del manto, parece ser la causa principal de la desaceleración observada», explicó Vidale.

Este descubrimiento es crucial para comprender mejor la dinámica interna de nuestro planeta y cómo estas fuerzas afectan al núcleo interno. La desaceleración observada podría tener implicaciones significativas para la geodinámica y el campo magnético de la Tierra, abriendo nuevas vías para la investigación futura en geofísica.

En resumen, el estudio de la USC arroja luz sobre un fenómeno complejo y previamente desconocido, demostrando que el núcleo interno de la Tierra ha comenzado a moverse más lentamente que la superficie por primera vez en décadas. Este hallazgo no solo desafía nuestras anteriores concepciones sobre el movimiento del núcleo interno, sino que también subraya la importancia de continuar investigando los procesos internos de nuestro planeta.