La humanidad se enfrenta a un gran desafío: la superpoblación global, el deterioro de los ecosistemas naturales y los efectos del cambio climático en la producción de alimentos plantean la amenaza de una futura escasez de alimentos y hambrunas en las regiones más desfavorecidas del mundo.
La responsabilidad social y el avance tecnológico son nuestras mejores herramientas para evitar un futuro sombrío. En el campo del foodtech, hay avances que ofrecen esperanza. Según informa Business Insider, algunos de ellos serán espectaculares y revolucionarios en los próximos años.
LA FERMENTACIÓN
Hablemos de fermentación. Este proceso milenario ha estado con nosotros durante siglos: el pan, el queso, la cerveza o el yogur son el resultado de la acción de microorganismos estratégicos en ciertos alimentos naturales.
Sin embargo, según informes recientes, en 2024 veremos muchas innovaciones que aprovechan tecnologías tradicionales como la fermentación, pero aplicadas a nuevas plantas y cultivos. En otras palabras, se avecinan nuevos alimentos.
Esto es crucial si queremos evitar depender únicamente de unos pocos alimentos como el trigo o la leche, lo que podría ser problemático en momentos de escasez. La diversidad de opciones en las tiendas será fundamental.
CULTIVADAS EN LABORATORIOS
Otra estrategia sumamente prometedora implica el desarrollo de alimentos desde cero mediante el cultivo celular. Un ejemplo destacado son las carnes generadas en laboratorio, eliminando la necesidad de criar animales. Aunque ya existen, el año 2024 promete ser un período crucial para la consolidación de las empresas en esta industria.
Según Iñigo Charola, CEO de la startup Biotech Foods, «la carne cultivada representa una de las revoluciones alimentarias con mayor potencial en las próximas décadas y una de las soluciones de foodtech más inspiradoras y ambiciosas». Prepárate, porque pronto podrías estar disfrutando de un filete de ternera cultivado en laboratorio.
¿Sin guarnición? Junto al filete, encontrarás vegetales provenientes de la agricultura regenerativa. Esta innovadora propuesta busca aumentar la productividad agrícola mientras reduce el uso de pesticidas y agua, fortaleciendo la resistencia de los cultivos al cambio climático.
Además de estas tres tecnologías, veremos el auge de la agricultura vertical, la proteína alternativa derivada de fuentes poco convencionales como hongos o microalgas, y el empaque sostenible basado en polímeros naturales. Estas sustancias se descomponen sin liberar químicos contaminantes, una necesidad urgente en nuestros tiempos.
AGRICULTURA REGENERATIVA
Además de reducir el uso de pesticidas y agua, la agricultura regenerativa también se enfoca en mejorar la salud del suelo y aumentar la biodiversidad. Estos cultivos no solo son más sostenibles, sino que también pueden ser más nutritivos y resistentes a las enfermedades.
AGRICULTURA VERTICAL
Esta tecnología permite cultivar alimentos en espacios urbanos verticales, como edificios o torres. Utiliza técnicas de hidroponía o aeroponía para maximizar el uso del espacio y reducir la necesidad de tierra y agua. La agricultura vertical tiene el potencial de aumentar la producción de alimentos en áreas urbanas densamente pobladas y reducir la dependencia de la importación de productos agrícolas.
PROTEÍNAS ALTERNATIVAS
Además de las carnes cultivadas en laboratorio, las proteínas alternativas incluyen productos a base de plantas, hongos, algas y insectos. Estos alimentos son más sostenibles que la carne convencional, ya que requieren menos recursos naturales para producirse y generan menos emisiones de gases de efecto invernadero. Además, pueden ofrecer una variedad de nutrientes y texturas que los hacen atractivos para los consumidores.
PACKAGING SOSTENIBLE
Los envases basados en polímeros naturales, como el bioplástico, la celulosa y el almidón, son una alternativa más ecológica al plástico convencional. Estos materiales son biodegradables y compostables, lo que significa que se descomponen en el medio ambiente sin dejar residuos tóxicos. Además, algunos envases sostenibles están diseñados para prolongar la vida útil de los alimentos y reducir el desperdicio.
TENDENCIAS
Además de estas tecnologías específicas, la industria alimentaria también está experimentando con otras tendencias emergentes, como la impresión 3D de alimentos, la inteligencia artificial en la producción agrícola y el cultivo de carne a partir de células madre. Estas innovaciones están transformando la forma en que producimos, procesamos y consumimos alimentos, y tienen el potencial de abordar algunos de los desafíos más urgentes en seguridad alimentaria y sostenibilidad.