La organización sin ánimo de lucro Time Use Initiative (TUI), que aboga por el derecho al tiempo en todo el mundo, ha instado a poner fin al cambio de hora en Europa, coincidiendo con el próximo cambio previsto para el 31 de marzo.

SALUD Y ECONOMÍA

Según la TUI, el cambio de hora estacional afecta negativamente a la salud individual y colectiva, así como a la economía. Se ha demostrado que vivir en zonas horarias incorrectas tiene un impacto negativo en áreas como el ahorro de energía, el riesgo de enfermedades como el cáncer, el rendimiento laboral y estudiantil, y el Producto Interno Bruto (PIB).

En concreto, según la organización, un 20% de los ciudadanos europeos y un 34% de las mujeres con hijos «sufren pobreza de tiempo», lo que les supone «afectaciones tanto al bienestar individual como a la cohesión social».

El Manifiesto de la UE propuesto por la TUI se centra en sectores clave que podrían verse más afectados por el cambio, como los servicios de emergencia y de transporte, e incluye una campaña de sensibilización pública.

La TUI desmiente algunos mitos comunes sobre el cambio de hora, como el ahorro de energía durante el horario de verano, señalando que podría aumentar el gasto energético debido a los patrones de consumo. También refuta la idea de que el fin del cambio de hora perjudicaría a la economía, argumentando que los hábitos diarios ya son constantes durante todo el año en cuanto a la hora.