La calle Sinesio Delgado en Madrid está a punto de experimentar un cambio significativo en materia de seguridad vial, ya que desde el próximo 15 de enero entrarán en funcionamiento dos radares de tramo, uno en cada dirección. Estos dispositivos, compuestos por lectores de matrículas y cámaras, registrarán la entrada y salida de vehículos, calculando así la velocidad media en un tramo de hasta 10 kilómetros.

El objetivo principal de esta iniciativa, respaldada por el Ayuntamiento, es reducir la velocidad y, por ende, disminuir la siniestralidad en el área controlada. Este tipo de radares se diferencia de los convencionales al cubrir tramos extensos, fomentando una conducción más consciente.

En el tramo en sentido Ciudad Universitaria, que abarca 1.783 metros, la velocidad máxima permitida será de 50 kilómetros por hora. El inicio y final del radar se encuentran cerca de la glorieta Piedrafita de Cebrero y la intersección con la avenida de Miraflores, respectivamente.

En dirección Castellana, el radar, que se extiende por 1.800 metros, comienza poco después de la intersección de Sinesio Delgado con la avenida de Miraflores y finaliza antes de llegar a la glorieta de Piedrafita de Cebrero.

El periodo de aviso, que comenzó el 15 de septiembre y se extenderá hasta el 14 de enero de 2024, busca informar a los conductores sobre la implementación de estos radares. Durante este período, las infracciones registradas no conllevarán multas, asegurando que los ciudadanos estén debidamente informados.

Las multas por exceso de velocidad, una vez activados los radares, oscilan entre 100 y 600 euros, con la pérdida de hasta seis puntos en el carné de conducir, según lo estipulado por la Ley de Seguridad Vial. El coste total de adquisición y puesta en marcha de los seis radares de tramo en Sinesio Delgado asciende a 95.000 euros, con 80.000 financiados por la Unión Europea a través de los fondos Next Generation EU. Este paso busca mejorar la seguridad vial y promover una conducción más responsable en la capital española.