En un mundo en el que la sostenibilidad está posicionándose como el eje sobre el que muchas empresas tienen que girar para poder ser competitivas, la rentabilidad se presenta como uno de los mayores retos para poder llevar a cabo la transformación de los sectores.
A este gran reto lo acompañan el vertiginoso avance de la tecnología y el cambio constante de las normativas, que hacen más complicado aún la toma de decisiones por parte de las empresas de cuáles son los objetivos a seguir y la manera de hacer las cosas. Porque ser pioneros en algo tiene un precio muy alto.
Para debatir estas cuestiones, HOY ARAGÓN ha reunido en la mesa de debate a Ana Cristina Fraile (Grupo Forestalia), Jorge Guillén (Idom) y a Zoilo Ríos para conocer los retos a los que se están enfrentando las empresas aragonesas en su camino hacia una sostenibilidad rentable.
LA INVERSIÓN EN SOSTENIBILIDAD
La sostenibilidad habla diferentes idiomas según el sector del que se trate, por eso en sí misma no se puede tratar de la misma manera para todos los sectores, y debe aspirar a lograr un modelo que funcione de manera concreta para cada uno para lograr el objetivo de ser eficiente.
En este sentido, Idom, especialistas en consultoría de ingeniería y arquitectura, ayuda a los clientes a buscar dónde tienen que focalizarse para conseguir los mejores resultados en cuanto a sostenibilidad. De esta manera, los ayudan a ser más sostenibles económicamente, medioambientalmente y además, como comenta Jorge Guillén, «estamos en una fase en la que la sostenibilidad es un arma de las empresas que les permite ser más resilientes».
La sostenibilidad también puede ser un arma de atracción, como en el caso de Grupo Forestalia, que pone a disposición del sector industrial energía renovable para que ejerza como elemento de atracción para la instalación de empresas en Aragón.
Pero la rentabilidad se presenta como uno de los retos más difíciles de asumir para las empresas en sus prácticas sostenibles. Empresas como Zoilo Ríos, que depende de un sector tan complejo como la movilidad, está muy determinado por la rapidez de los avances tecnológicos y por la demanda. Como comenta Ríos, «lo verde es caro», y para las pymes es aún más complejo llevar a cabo este tipo de inversiones.
«Es muy complicado ser pionero en algo porque eso supone asumir una serie de inversiones importantes», comenta el CEO. Aún así, este grupo de estaciones de servicio aragonesas pueden presumir de ser pioneros en suministro de hidrógeno en Aragón.
MUCHAS OPCIONES COMPATIBLES
Sobre la mesa el debate interminable. ¿Qué energía es mejor y más sostenible económica y medioambientalmente? Aragón es el paraíso de las renovables, y Grupo Forestalia tiene, por la naturaleza de su ser, una actividad 100% sostenible gracias al aprovechamiento del recurso más preciado de nuestra comunidad: el aire. Con su actividad persiguen el «objetivo europeo de que el 42% del consumo final de energía sea renovable».
Pero hay otras alternativas, como el hidrógeno, que según Zoilo, «ha tenido un gran boom de expectativas sobredimensionadas y ahora se ha desinflado». Pero el caso no es debatir qué energía es mejor, sino buscar cuál se adapta mejor a cada sector concreto para aprovechar su eficiencia.
En este sentido, los ponentes están de acuerdo en que sería necesario crear una estrategia país, ya que todas las energías son complementarias, por lo que «si hay una estrategia país energética que tiene claro hacia dónde va y el reparto que hay todo sería más fácil», finaliza Zoilo Ríos.
Ana Cristina Fraile, directora de sostenibilidad de Forestalia, apunta que estamos en un momento de muchas «incertidumbres», ya que la tecnología avanza muy rápido, las normativas son cada vez más exigentes y la demanda también, por lo que «es muy complicado poder orientar cuáles son tus objetivos fundamentales».
RETOS DE ARAGÓN
Ante todo este panorama los ponentes sugieren que Aragón tiene por delante varios retos. Por parte de Zoilo Ríos, el reto más importante de nuestra comunidad es «convertirse en un valle de hidrógeno verde» ya que «tenemos todos los mimbres para hacer que Aragón sea líder a nivel nacional y europeo».
Por su parte, Fraile plantea que uno de los retos es «aprovechar la capacidad de generación de energías renovables para posicionarse como una comunidad autónoma líder en la en la atracción de empresas». Desde Forestalia plantean también la cuestión de que las renovables se pueden convertir en un factor clave a la hora de combatir la despoblación, ya que podrían ser «una palanca muy importante para la generación de riqueza a nivel del mundo rural», finaliza Fraile.
Para Jorge Guillén el reto pasa por ser «pioneros en algo», puede ser el hidrógeno u otro tipo de energías que dan rentabilidad a las empresas, pero la clave será tener un «sector industrial fuerte para convertirnos en un polo energético e industrial resistente a frente a la competencia en Zaragoza, dentro de España y fuera».