En respuesta a una creciente población de estorninos que supera los 80.000 ejemplares en la ciudad de Huesca, el Ayuntamiento ha implementado estrategias creativas y efectivas para controlar esta plaga.

Un equipo de expertos en control de plagas, respaldado por el Departamento de Medio Ambiente local, está llevando a cabo una serie de medidas para disuadir a los estorninos y fomentar su migración fuera de la ciudad.

Desde las 17:45 hasta las 18:30 horas, en los parques Miguel Servet y del Encuentro, se están utilizando diversas herramientas, incluyendo cohetes, tiras cracker, ultrasonidos y cañones de propano. Estas tácticas buscan perturbar la rutina de los estorninos y alentarlos a abandonar la zona urbana.

La intervención se lleva a cabo en esta época del año debido a que la hoja caduca de los árboles ya ha caído, reduciendo así los refugios disponibles para los estorninos. Este enfoque estratégico permite al Ayuntamiento estudiar cómo evitar que estas aves regresen a la ciudad desde octubre, cuando suelen ser más problemáticas.

El Ayuntamiento de Huesca realiza un seguimiento de la población de estorninos de octubre a marzo, tomando medidas proporcionales según la cantidad de aves presentes. En esta ocasión, la alta población ha llevado a la implementación de medidas excepcionales para mitigar los impactos negativos.

Conscientes de las molestias que estas acciones pueden causar, el Ayuntamiento ha emitido advertencias a personas con alta sensibilidad acústica y a los dueños de mascotas. Se espera que las afecciones acústicas duren aproximadamente 30 minutos durante las intervenciones.

La Policía Local estará presente en las áreas afectadas para informar a los ciudadanos y garantizar que no se acerquen a las zonas donde se están llevando a cabo estas actuaciones.