El Clúster de la Energía de Aragón (Clenar) ha expresado este miércoles su rechazo a la ley autonómica por la que se crean nuevos impuestos medioambientales sobre la explotación de parques eólicos y fotovoltaicos por tener «un objetivo meramente recaudatorio».

A juicio del Clúster, la compensación ambiental que dice defender la ley en su exposición de motivos no se ve reflejada ni en su articulado ni en sus disposiciones transitorias.

Asimismo, Clenar ha negado que haya participado en el consenso de dicha ley ya que sus aportaciones principales –la exención completa a la fotovoltaica, la progresividad en la eólica y la exención total en el autoconsumo– han sido desestimadas.

Esta entidad ha alertado también del riesgo que estos nuevos tributos suponen tanto para el actual sector de las energías renovables en la comunidad como para la atracción de nuevas inversiones y de que van a impactar «muy negativamente en el desarrollo económico».

«Desde su compromiso con el territorio y la transición energética, el Clúster de la Energía de Aragón considera que estos impuestos van a derivar en un impacto negativo en la competitividad de la economía e industria de la región, a la vez que van a conllevar un desincentivo a las inversiones en instalaciones de producción de electricidad e hidrógeno renovable, estas últimas en un estado todavía incipiente de desarrollo y necesitadas por tanto de una regulación adaptada y favorable por parte de las administraciones públicas», han señalado.

UNA LEY CON CONSENSO

Por todo ello, el Clúster de la Energía de Aragón ha instado al Gobierno autonómico a no seguir con la tramitación de la actual Ley de Impuestos Medioambientales y ha reclamado consenso para poder elaborar un nuevo texto.

Para ello, ha pedido que se tomen en consideración los beneficios ambientales, sociales y económicos que conllevan las instalaciones de energía renovable y que la política fiscal no suponga una desventaja competitiva con respecto a otras regiones en el sector eólico.

Del mismo modo, el Clúster ha solicitado que se reconozca que «Aragón se convierte en la primera comunidad en gravar la producción renovable fotovoltaica» y que se sea consciente de que se ha convertido en la de mayor carga fiscal en el sector.

Así pues, Clenar ha apostado por una nueva ley medioambiental «clara y efectiva», que refleje la proporcionalidad del gravamen frente al impacto generado, y por transmitir «confianza y seguridad jurídica» al sector para garantizar nuevas inversiones.

UN SECTOR ESTRATÉGICO EN ARAGÓN

El Clúster ha defendido que el sector de las energías renovables en Aragón es «un pilar fundamental para el desarrollo sostenible de la región» porque «el notable crecimiento en la generación de energía limpia, sostenible e inagotable, respaldado por una prolija normativa y una regulación pionera» sitúa a la comunidad como «un referente» a nivel nacional.

Del mismo modo, ha destacado que Aragón es líder en generación fotovoltaica en la mitad norte de la península Ibérica, lo que se ha visto reflejado en el notable aumento de la producción verde, que ha alcanzado los 14.665 GWh, lo que representa el 80,3% del cómputo global.

Ha resaltado también el «notable crecimiento» del sector en los últimos años, hasta convertirse en «un pilar fundamental para el desarrollo de la región» y en «una potencia en la generación de energía limpia, sostenible e inagotable».

Así, Aragón ha duplicado su producción de energía renovable en los últimos cinco años, pasando del 54% al 80,3% del total gracias a una inversión significativa en parques eólicos y plantas solares. Esta tendencia se ve respaldada por «una normativa prolija, exigente y restrictiva, que garantiza la sostenibilidad y el respeto al valioso patrimonio natural aragonés».

«La inversión milmillonaria en parques eólicos y plantas fotovoltaicas ha sido posible gracias a esta regulación, que ha permitido el incremento de la potencia instalada en la región», ha concluido.