El Real Zaragoza ha sacudido a la ciudad tras anunciar que renuncia a la construcción y explotación de la nueva Romareda por no tener financiación externa. Todo ello debido a la inseguridad jurídica que existe por el recurso judicial sobre la fórmula jurídica para realizar las obras del nuevo estadio. Este jarro de agua fría ha sido recibido por el Ayuntamiento pocos minutos antes de conocer la decisión del club.
Esta decisión, tal y como ha trasladado la alcaldesa, Natalia Chueca, en una rueda de prensa urgente convocada horas después del anuncio del Real Zaragoza, ha sido una gran sorpresa y nadie se la esperaba en el gabinete de Chueca.
La alcaldesa ha trasladado que esta decisión por parte del Real Zaragoza se debe a las «trabas» jurídicas y políticas por parte de la izquierda. «La izquierda ha conseguido paralizar el proyecto de La Romareda que no nos costaba dinero a los zaragozanos». A la vez que ha querido recalcar que el recurso «ha generado una inseguridad financiera y jurídica».
El club estaba decidido a concurrir a la construcción del estadio y así lo había manifestado oficialmente, pero la inseguridad jurídica creada por el recurso presentado por el Grupo Municipal de Podemos ante el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón y la anulación del pliego de condiciones decidida por dicho órgano, han creado un obstáculo que ha resultado finalmente insalvable para la obtención de la financiación externa.
A pesar de la decisión del Real Zaragoza de desistir en la construcción y explotación del nuevo estadio de fútbol, la alcaldesa ha querido transmitir un mensaje de confianza a los zaragozanos: «Mi compromiso no ha cambiado y seguiré trabajando para sacar un proyecto necesario para la ciudad«. En palabras de Chueca: «Tampoco ha cambiado la necesidad que tiene la ciudad y el Real Zaragoza de tener un nuevo estadio».
Por último, la alcaldesa ha afirmado que se van a poner a trabajar ya mismo para encontrar una solución y ha explicado que «se cierra una puerta pero es una oportunidad para abrir otra y establecer una nueva vía de colaboración institucional». «Vamos a hablar con el club y entidades financieras. Nuestra prioridad es seguir adelante para no perder la posibilidad del Mundial», ha valorado.
En esta situación y debido al bloqueo de la financiación, el Real Zaragoza lamenta profundamente tener que renunciar a presentarse al concurso. No obstante, el club se muestra comprometido para que la ciudad, el equipo y la afición puedan tener nuevo estadio y preservar así la candidatura de Zaragoza al Mundial de Fútbol 2030.