El Cardenal Juan José Omella, líder de la Conferencia Episcopal Española y Arzobispo de Barcelona, ha expresado su desacuerdo con las cifras relacionadas a los abusos sexuales a menores en el ámbito de la Iglesia Católica, tachándolas de «mentira con intención de engañar». Esta contundente declaración se produce tras la divulgación del informe presentado por el Defensor del Pueblo, que aborda extensamente el tema de los abusos a menores.

A pesar de la confrontación con las cifras, el Cardenal Omella reconoce la necesidad de que la Iglesia continúe pidiendo perdón y trabajando en la sanación de las víctimas. A través de un mensaje en la red social X, Omella afirmó: «No nos cansaremos de pedir perdón a las víctimas y trabajar por su sanación».

El Arzobispo hizo alusión al Catecismo de la Iglesia Católica 827, señalando que «la Iglesia es a la vez santa y siempre necesitada de purificación… Todos los miembros de la Iglesia, incluso sus ministros, deben reconocerse pecadores.»

Este punto resalta la dualidad de la Iglesia, que congrega a pecadores ya redimidos por Cristo, pero todavía en proceso de santificación.

Sin embargo, Omella no ha profundizado sobre el contenido del informe del Defensor del Pueblo titulado «Una respuesta necesaria». Este documento, resultado de una investigación, está basado en testimonios de 487 víctimas y una encuesta a 8.013 personas, revelando que un 11,7% de los españoles ha sufrido abusos sexuales antes de cumplir los 18 años.

El Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, quien presentó el informe a Francina Armengol, presidenta del Congreso, se abstuvo de extrapolar las cifras. Sin embargo, de hacerlo, indicaría que más de 445.000 personas podrían haber sufrido abusos en contextos religiosos, y casi 236.500 por parte de sacerdotes.