El Real Zaragoza concluía el mercado de fichajes con las llegadas Edgar Badía, Raúl Guti y Akim Zedadka. El club tenía claro las posiciones en la que reforzarse tras los visto hasta ahora en lo que se lleva de temporada, con un déficit importante en el lateral izquierdo y en el ataque, dos posiciones que no han sido cubiertas. 

La intención de Juan Carlos Cordero siempre ha sido reforzar varias demarcaciones y dar salida a los jugadores con los que no se contaba, como Gaetan Poussin, que no ha podido salir en este mercado y el club cuenta ahora con 4 porteros en la primera plantilla. La presencias de los cuatro guardametas es algo inusual a estas alturas de campeonato, por lo que se ya puede considerar un error de planificación.

Se confía mucho en la vuelta de Sinan Bakis, en el acierto de Azón y que la segunda línea aporte goles. Ese ha sido el principal argumento para no firmar un delantero centro en este mercado. Lo cierto es que la capacidad goleadora del equipo ha dejado mucho que desear hasta este momento y el club no ha considerado incorporar un 9. 

La lesión de Carlos Nieto y las molestias físicas de Quentin Lecoeuche también han supuesto que el lateral izquierdo se quede incompleto. Una necesidad que se conocía desde la jornada 5 y el club, en lugar de apostar por esa demarcación, optó por fichar a Akim Zedadka, un lateral derecho procedente del Lille. 

Andrés Borge y Fran Gámez han venido jugando en el lateral diestro, puesto al que se suma ahora Zedadka. El ‘overbooking’ de futbolistas en la portería y en el lateral derecho ha supuesto toda una sorpresa en esta ventana invernal. 

La posición mejor cubierta tras el mes de enero es la del centro del campo, con Grau, Francho, Marc Aguado, Toni Moya y Guti. El sistema de juego elegido por Velázquez desde su llegada, con 3 centrales y 2 carrileros, ha influido demasiado en el mercado zaragocista. 

El club no se plantea acudir al mercado de jugadores en paro y la salida de Poussin, todavía con varios mercados internacionales abiertos, se da prácticamente por imposible.