En medio del árido paisaje del desierto del Sinaí, Egipto alberga un prodigio arquitectónico que ha ganado el título Guinness de la piscina más grande del mundo. Con una extensión de 96,000 metros cuadrados y abarcando aproximadamente 12.5 hectáreas, esta obra maestra acuática se encuentra en el corazón del opulento resort Citystars Sharm El Sheik.

La colosal piscina, creada por la firma Crystal Lagoons, requiere un impresionante proceso de llenado que toma alrededor de veintidós días. Utilizando agua del mar, se bombean unos trescientos millones de litros para completar su grandioso tamaño de 180 metros de largo y 750 de ancho. Este asombroso proyecto ha transformado lo que antes era solo desierto en un oasis acuático.

El resort Citystars Sharm El Sheik, apodado el «Las Vegas de Oriente Medio», no solo alberga esta majestuosa piscina, sino que también ofrece un completo complejo para sus visitantes. Con capacidad para 30.000 turistas, el lugar cuenta con hoteles de lujo, campos de golf, un centro comercial y otras once piscinas que añaden un toque de frescura en medio del calor desértico.

Este impresionante desarrollo no llegó sin un costo significativo, con una inversión de 4,900 millones de euros en su construcción. El resort, enmarcado por un imponente muro de seis metros de altura, solo permite el acceso a través de puntos específicos, estrictamente vigilados para mantener la exclusividad y seguridad del lugar.

La piscina más grande del mundo en Egipto no solo establece un récord en dimensiones, sino que también representa un oasis lujoso en medio del desierto, fusionando la grandiosidad de la naturaleza con la creatividad y el ingenio humano.