España cuenta con una extensa red de Paradores situados en diferentes sitios a lo largo del país. Estos alojamientos suelen hallarse en enclaves históricos como castillos, palacios y fortalezas. Por ejemplo, el Parador de Cádiz ofrece vistas al océano Atlántico y otro está situado a una altitud de 1.500 metros y dotado de una impresionante piscina.

Hablamos del Parador de Cruz de Tejeda, localizado en el municipio de Tejeda. Enclavado a 1.560 metros sobre el nivel del mar, se alza en uno de los puntos más elevados de la isla, ofreciendo vistas espectaculares.

Desde las terrazas de este establecimiento, se puede apreciar el paisaje cultural del Risco Caído y los espacios sagrados de las montañas de Gran Canaria, designados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2019. La posición del Parador es idónea para los aficionados al senderismo y la escalada. La ruta más popular es la que discurre desde Tejeda hasta el Roque Nublo, un monumento natural con casi 90 metros de altura, situado en el punto culminante de la isla. Desde allí, se disfrutan vistas impresionantes de la Caldera de Tejeda, el Pico de las Nieves y el monte Teide, ubicado justo enfrente, en la isla vecina de Tenerife.

Además de su entorno, el Parador de Cruz de Tejeda ofrece un spa con baño de burbujas, baño turco, tumbonas térmicas, ducha ciclónica, jacuzzi al aire libre y sauna. No obstante, uno de sus principales atractivos es su piscina, que proporciona unas vistas asombrosas de la montaña, permitiéndote disfrutar de la naturaleza sin salir del agua.