Aragón es una de las joyas invernales de Europa que se erige como el paraíso de los amantes de la nieve y los deportes en plena naturaleza. Enclavado en los majestuosos Pirineos, este destino ofrece una experiencia única, fusionando la emoción de las pistas con una oferta hotelera y gastronómica de primer nivel.
Estaciones de esquí
Con seis estaciones de esquí alpino y ocho espacios nórdicos, Aragón se presenta como un imán para los entusiastas de la nieve. Sumando 395 kilómetros esquiables, el Pirineo aragonés alberga estaciones icónicas como Astún, donde los amantes del snowboard encuentran su paraíso.
Astún
En pleno valle del río Aragón se encuentra Astún, muy cerca de la animada ciudad de Jaca que añade un toque cultural a la experiencia. Desde la catedral románica hasta el Monasterio de San Juan de la Peña, Jaca cautiva con su patrimonio. La Cueva de la Güixas en Villanúa amplía las opciones, ofreciendo actividades al aire libre que se entrelazan armoniosamente con las estaciones de esquí.
Candanchú
La estación pirenaica de Candanchú, pionera en España, se presenta como un lugar ideal para iniciarse en el esquí. Con pistas míticas como El Tobazo, ofrece no solo emoción en las laderas sino también cursos de esquí para todas las edades. La cercanía a la frontera con Francia añade un toque internacional.
Formigal-Panticosa
Aramón Formigal-Panticosa se destaca como el mayor destino de esquí en España, con 180 kilómetros esquiables. Además de las emocionantes pistas, esta estación se transforma en un hervidero de actividad tanto de día como de noche. Desde actividades programadas en pistas hasta paseos nocturnos en motos de nieve, Formigal ofrece una experiencia completa.
Panticosa
Panticosa, con sus 39 kilómetros esquiables, se presenta como un destino familiar. Sus múltiples senderos y el Panticosa Resort ofrecen una mezcla de diversión y relajación. Para los más pequeños, el snowpark infantil es un lugar ideal para comenzar a explorar saltos y trucos.
Cerler
En el valle de Benasque, Aramón Cerler impresiona con las bajadas más largas del Pirineo. Con un desnivel esquiable de 1,130 metros, la estación ofrece 68 pistas y un entorno natural espectacular. En verano, el telesilla del Aneto se convierte en un balcón natural con vistas impresionantes.
Javalambre y Valdelinares
Aramón Javalambre y Aramón Valdelinares en Teruel ofrecen una entrada perfecta al mundo del esquí. Además de clases personalizadas, estas estaciones brindan la oportunidad única de contemplar las estrellas en las noches claras. Los alrededores, con sus rutas naturales y exquisita gastronomía local, completan la experiencia.
Espacios nórdicos
Para los aventureros, los espacios nórdicos en los Pirineos y la Sierra de Albarracín ofrecen la posibilidad de practicar esquí de fondo, raquetas y cross country. Más allá de las estaciones, Aragón se revela como un territorio vasto para explorar con más de 1,000 km de rutas, repletas de naturaleza y gastronomía.