Los fans de las gildas son (o somos) legión. Podrán darnos tapas de diseño, esferificaciones o mil y una propuestas de vanguardia para tomar el vermú. Pero lo cierto que es las gildas siguen reinando en barras de bares y tascas. Esta delicia en miniatura que es imprescindible en los medio días de muchos, combina la aceituna y la guindilla con alguna conserva de pescado, normalmente una anchoa, aunque hay múltiples variantes.

Estos deliciosos ingredientes, que son una explosión de sabor fuerte y ácido en la boca, están ensartados por un palillo para ligarlos de forma única. Su nombre comenzó a utilizarse en la siempre elegante San Sebastián, haciendo un homenaje a Rita Hayworth cuando en 1946 protagonizó la película Gilda ¿El motivo? Que esta banderilla tan castiza que ya existía anteriormente era salada, verde y con un punto picante. Como la Hayworth, en esa inolvidable escena que ya es parte de la historia del cine, con la actriz quitándose el guante con ese sugerente erotismo que es cosa de tiempos pasados.

DÓNDE COMER GILDAS EN ZARAGOZA

En Zaragoza hay múltiples lugares dónde comer gildas. Y además, por todos los barrios de la ciudad. Desde las tascas centenarias, hasta los modernos quioscos. Porque en ocasiones, las cosas del pasado, nunca pasan de moda. O quizás, se vuelvan a poner de moda. El caso es que en la capital aragonesa hay una buena nómina donde comer gildas acompañadas de vermús, cañas, una copita de vino o un Aperol spritz. Porque si algo tiene esta banderilla es que acompaña bien con todo.

A medio día, las gildas son irresistibles / Bar El Circo

Pero ¿Dónde podemos disfrutar del sabor de este encurtido ensartado? En clásicos como Bodegas Almau (Estébanes, 10), las banderillas van que vuelan desde hace décadas. Pensar en vinagrillos es pensar también en Vino Rubio (Sta. Teresa de Jesús, 8), donde además de banderillas, hay multitud de encurtidos, embutidos, raciones, y vermú, por supuesto.

O en locales míticos como Antigua Casa Paricio (Coso, 188), donde puedes acompañarla de un buen vermú casero junto a una de sus míticas anchoas en salmuera, o El Circo (Jerónimo Blancas, 4), donde puedes acompañar la gilda de su rica tortilla de patata, o de una ración de ensaladilla rusa.

En nuestra ruta por el mundo de las gildas y las banderillas tampoco podemos olvidarnos de Vinagre & Rock (calle Cortesías, 7), o de Mercado & Vermú (Zurita 12). En La Almozara no podemos dejar de mencionar el bar Gilda (Avenida de la Almozara, 8), donde las propuestas de vinagrillos son casi infinitas. Entre los últimos en llegar, destaca La Casa de la Marimonera, el local de ambiente andaluz que los Urban Vicart han abierto en el Casco Histórico, con unas gildas realmente espectaculares.