En medio de la sequía que afecta a la mayor parte de las provincias de Barcelona y Girona, con seis millones de habitantes y sus actividades económicas en jaque, surgen nuevos negocios para sortear las restricciones.

Entre ellos, destaca el uso de agua de mar en piscinas como alternativa, ante la prohibición de utilizar agua dulce para llenarlas o rellenarlas.

PISCINAS CON AGUA DE MAR: ¿ASÍ DE FÁCIL?

Sin embargo, esta solución no es tan sencilla como podría parecer. Según la Agencia Catalana del Agua (ACA), optar por piscinas de agua de mar implica desconexión total de la red de suministro. Prescindiendo de captar agua y desaguar, evitando así daños a los ecosistemas fluviales y los sistemas de depuración. Además, las piscinas tradicionales necesitan adaptaciones para funcionar con agua de mar, pudiendo solo colocarse en líneas de costa con tuberías de vaciado al mar.

La Federación Catalana de Campings considera esta opción para el próximo verano, explorando nuevas formas de mantener operativas las instalaciones acuáticas. El interés en el tema se refleja en las preguntas frecuentes, donde la problemática de las piscinas destaca.

Empresas dedicadas al suministro de agua para piscinas también están adaptándose a esta nueva demanda, ofreciendo opciones vinculadas al agua de mar. El salón Piscina & Wellness 2023 de Fira de Barcelona demostró esta tendencia al llenar sus instalaciones con agua de mar vitalizada, en colaboración con Más Que Iniciativas, una empresa que emplea a personas con discapacidad.

Esta compañía, junto con otras como Aquamarina Costa Brava y Adesco, cuentan con permisos para recolectar agua marina de manera sostenible. Utilizan plantas móviles de filtrado y tratamiento para mejorar la calidad del agua antes de transportarla a piscinas, reduciendo así el impacto ambiental.

A pesar de estas innovadoras soluciones, empresas como Fluidra, líder global en el sector, argumentan que aplicar tecnologías existentes es más efectivo que prohibir prácticas como el llenado de piscinas.

LAS ASOCIACIONES HABLAN

La Asociación Española de Profesionales del Sector Piscina (Asofap) también defiende la importancia del sector, representando el 0,5% del agua suministrada en todo el país. España es el cuarto país en piscinas a nivel mundial y el segundo en Europa, se destacan las 2.000 empresas y 40.000 puestos de trabajo. En este contexto, la búsqueda de alternativas sostenibles en medio de la sequía marca un punto de inflexión para las piscinas en Cataluña.