En el marco del Foro Económico Mundial 2024 en Davos, Suiza, la Organización Mundial de la Salud (OMS) centrará la atención mundial en la «enfermedad X«, un hipotético patógeno emergente con el potencial de propagarse rápidamente a nivel global, similar a lo ocurrido con el coronavirus.
Este tema sanitario de urgencia será tratado bajo el lema «una estrategia a largo plazo para el clima, naturaleza y energía», integrando las preocupaciones sanitarias con las medioambientales.
La «enfermedad X» no es un concepto nuevo para la OMS, que ha abordado esta amenaza en varias ocasiones. Se estima que podría ser hasta 20 veces más letal que el virus originado en Wuhan en 2019. Según la OMS, esta enfermedad podría surgir de una patología ya conocida, como la gripe, o de una aún no descubierta, representando una grave amenaza para la salud humana global.
LA ENFERMEDAD X Y EL AVISO DE LA OMS
La sesión «Preparándose para la enfermedad X», contará con la participación de Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. Esta importante discusión estará vinculada a la Asociación para la Sostenibilidad y Resiliencia de los Sistemas de Salud y la Iniciativa de Vigilancia Colaborativa del Foro Económico Mundial, enfocándose en la preparación y respuesta a emergencias sanitarias de gran magnitud.
Junto a Ghebreyesus, la mesa redonda contará con la presencia de destacados líderes y expertos en el campo de la salud y la asistencia sanitaria, incluyendo a Shyam Bishen, jefe del Centro de Salud y Asistencia Sanitaria; Roy Jacob, presidente y director ejecutivo de Royal Philips; Preetha Reddy, vicepresidente ejecutivo de Apollo Hospitals Enterprise Ltd; Nisia Trindade Lima, ministra de Salud de Brasil; y Michel Demaré, presidente de la junta directiva de AstraZeneca Plc.
El enfoque de la sesión será explorar cómo los sistemas de salud globales pueden prepararse mejor para enfrentar la aparición de enfermedades desconocidas y potencialmente devastadoras. La discusión promete ser un foro vital para el intercambio de ideas y estrategias que puedan fortalecer la capacidad de respuesta mundial a las crisis sanitarias futuras.
Este tema es de especial relevancia en un mundo que todavía se está recuperando de los efectos de la pandemia de COVID-19 y busca formas de mejorar la resiliencia y la preparación ante futuras amenazas epidémicas.