Una de las habitaciones del módulo de reclusos en la planta 10 del hospital Miguel Servet de Zaragoza quedó completamente reventada. ¿La razón? Un interno que había llegado de la cárcel de Daroca, trasladado por tragarse varias cuchillas, se dedicó a arremeter contra el tabique de la habitación, destrozando la pared, y todo por unos cigarrillos que pidió al preso de la habitación de al lado.

En un dramático episodio en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza, un peligroso recluso desató una serie de eventos con el fin de obtener lo que exigía. Brahím C., un individuo de 35 años de nacionalidad marroquí, quien ingresó al hospital en la noche del martes, se vio envuelto en un conflicto al intentar conseguir cigarrillos de su compañero de prisión, Florin, quien se encontraba en la habitación contigua.

La situación alcanzó su punto máximo cuando Brahím comenzó a clamar por cigarrillos a través del personal de seguridad que custodiaba la sección del hospital. Al no recibir una respuesta satisfactoria, optó por medidas extremas y emprendió la tarea de derribar la pared que separaba las dos habitaciones, creando un agujero por el cual pudo acceder al espacio donde se encontraba Florin.

La actitud amenazante y violenta de Brahím llevó a que los agentes hospitalarios tomaran la decisión de evacuar a Florin para proteger su integridad. Mientras tanto, Brahím quedó atrapado entre las dos habitaciones, portando un objeto punzante en una mano, lo que provocó la solicitud de asistencia policial adicional.

Cuatro vehículos de la Policía Nacional se desplazaron hasta el hospital para abordar la situación. A pesar de las amenazas de Brahím, los agentes intentaron persuadirlo para que se entregara pacíficamente, y finalmente cedió en su actitud violenta, abandonando el objeto con el que había dañado la pared.

Una vez que Brahím fue reducido y detenido, se le administró medicación para calmar su agitación. Se espera que enfrente cargos adicionales por lesiones, resistencia a la autoridad y daños, una vez que se presente el informe policial correspondiente ante las autoridades judiciales.

Este incidente se suma a la historia delictiva de Brahím, quien aparentemente fue trasladado al hospital zaragozano después de ingerir varias cuchillas mientras cumplía condena en la prisión de Daroca.