Sucedió la noche del sábado al domingo. Un fuerte vendaval dejaba al cristo del Sagrado Corazón de Jesús de la localidad turolense de Muniesa sin una de sus manos. El impacto entre los vecinos al ver manco a una de sus referencias fue total.

La estatua, de cinco metros de altura, está situada en la torre de la ermita de Santa Bárbara. El alcalde de la localidad ya informó entonces que algunas de las piezas desprendidas habían sido recuperadas y que habían acordonado la zona ante el riesgo de nuevos desprendimientos.

El primer edil también explicó que este suceso ha producido un gran impacto entre los vecinos de mayor edad que recordaban todavía como se colocó la escultura hace más de 50 años.

el mismo domingo, tras la tormenta y después de que otro vecino alertara de la situación,  una vecina de la localidad daba en sus redes sociales una buena noticia a los vecinos que seguían lamentando esta situación. «Al dar una vuelta por el huerto nos hemos encontrado una mano; la del Corazón de Jesús de Santa Bárbara. Que pronto se reponga», explicaba esta vecina en ‘Facebook’.

Uno de los vecinos guarda un dedo y el resto de la mano la tiene el cura de la localidad a buen recaudo. Según este vecino dicha mano podría medir 5 metros y pesar 7.000 kilos. «La mano la recuperó una mujer con su marido cuando iban al huerto y el dedo que guardo otra vecina. Debió rebotar en algo y estaba en otro sitio», explica.

Ahora, ya con toda la mano y dedos en poder de los vecinos de Muniesa y de su párroco esperan que el Cristo del Sagrado Corazón de Jesús, que lleva toda la semana sin una de sus manos, pueda recuperar todo su esplendor. Un referente para los vecinos y para la Comarca de las Cuencas Mineras.