Los hechos han tenido lugar en la calle Conde Aranda en torno a las dos de la madrugada. De nuevo, en el interior del bar ‘La Manduca’ donde, según los vecinos, se originan gran parte de las peleas en esta céntrica calle.

Una mujer, clienta habitual del bar, entraba de madrugada al establecimiento y, según declaró, al saludar a otra cliente, a quien previamente conocía, ha recibido un empujón y ha caído al suelo.

Como consecuencia de la caída se ha golpeado la cabeza con la esquina de la barra y ha empezado a sangrar de manera abundante. La bronca ha continuado dentro y fuera de ‘La Manduca’ entre estas dos mujeres.

Han seguido agrediéndose y empujándose en plena calle, entre gritos e insultos que han sobresaltado de nuevo a los vecinos de este barrio, demasiado acostumbrados a este tipo de hechos.

Los agentes de la Policía Nacional que se han personado en el lugar, un local que conocen muy bien, han identificado a ambas mujeres y han avisado a una ambulancia para atender a la herida en la cabeza de una de ellas.

PIGNATELLI, DE NUEVO SEÑALADO

Se da la circunstancia que hace tan solo unos días, las asociaciones de vecinos volvían a poner en el punto de mira la calle Pignalleti, a tan solo unos metros de Conde Aranda. De nuevo agresiones y robos a viandantes y vecinos.

La violencia continua, a pesar del cierre de varios bloques okupados en la calle que eran el foco de las tensiones. Desde las asociaciones apuntan a, al menos, una decena más de bloques con okupas.

En dichas viviendas, añaden, se sigue vendiendo droga y se esconden aquellos que cometen los robos en la calle. Una situación delincuencial que persiste en el corazón de la capital aragonesa.