Soria es una provincia muy cercana a Aragón. Por distancia geográfica, por compartir los problemas de la España vaciada, y porque en la capital aragonesa hay mucho soriano residiendo. También son muchos los zaragozanos que pasan el verano en los pueblos de esta provincia castellana, que se juntan a los sorianos que trabajan y estudian en Aragón, y vuelven a su casa a pasar las vacaciones.

Uno de los pueblos que se ha convertido en refugio de los zaragozanos en los meses del estío es Navaleno. Este pequeño pueblo que no alcanza los 800 habitantes está situado entre sierras en la zona de Pinares Bajos, a 1.105 metros de altitud, y se encuentra a dos horas y media de la capital aragonesa.

Al norte, están las sierras de Urbión y de Resomo, mientras que al este encontramos las sierras de Nafria y Cabrejas. Su entorno natural, y en particular, el Pinar Grande, son los grandes atractivos de esta localidad rodeada de parajes de gran belleza por los que es posible practicar senderismo, entre otras muchas actividades como la micología. De hecho, Navaleno es el destino micológico por antonomasia de la provincia de Soria.

La iglesia de San Esteban es de estilo gótico / Turismo de Soria

El pueblo, atravesado por el Camino de Santiago de Soria (también conocido como castellano-aragonés), cuenta con un recoleto casco urbano, en el que destacan su iglesia gótica, dedicada a San Esteban Protomártir, y la ermita de San Roque. También destaca el ayuntamiento y varios edificios palaciegos y de arquitectura tradicional, con las casonas de piedra del barrio de Triana donde puede intuirse el pasado carretero del municipio.

La estación de ferrocarril del pueblo es otro punto a destacar. Comenzó a dar servicio en 1929, con la inauguración del tramo Cabezón de la Sierra-Soria. Y está cerrada al tráfico ferroviario desde 1984. En la actualidad hay un albergue dando vida a las instalaciones, y allí se han rodado películas como ‘Doctor Zhivago’. También hay que visitar el monumento a los carreteros, levantado como recuerdo a aquellos momentos en los que gran parte de la población se dedicaba a la carretería.

Rodeando el pueblo está el auténtico monumento de la zona, el pinar, un pinar de naturaleza virgen con parajes por los que merece la pena perderse para disfrutar de la soledad y de la desconexión absoluta, con lugares como Valdelahierba, Barranco-Lobo, Raso Manarena, Fuente la Raíz,  Cova La Loba, Atalaya de Mojón Pardo, Vallejondo, Cuevas del Moro, La Cruceja, Fuente  La Ramona, Paso de la Soltilla, Fuentes de Corrales, Paso de la Solana, Junta de los Tres Valles o Atalaya de Brabojo.

Si te gusta el senderismo, hay propuestas como la rutas circulares de Navaleno (6,7 km), Otero Mayor (9,6 km), la de los Llanos ( 6,7 km) o la Ruta Mojón Pardo (9,5 km). También puedes tomar la etapa 4 del sendero GR 86, 18,2 km con salida en Duruelo de la Sierra y llegada en Navaleno.

Como dato y antes de acabar por si te decides a pasar allí las vacaciones, las fiestas de San Roque y la Asunción, las más importantes del municipio, se celebran del 14 al 18 de agosto.