La ruta de Bécquer se presenta como una experiencia única para los amantes de la literatura y la naturaleza. Este recorrido nos sumerge en los pasos de los hermanos Bécquer, Gustavo Adolfo y Valeriano, dos figuras destacadas del siglo XIX cuya obra ha dejado una huella imborrable en esta encantadora región.

El punto de partida es el Monasterio de Veruela, un lugar que fue refugio e inspiración para los hermanos. En sus jardines y estancias, uno puede sentir la magia que envolvió a estos escritores y explorar el Espacio Bécquer, un museo que nos sumerge en su universo creativo a través de exposiciones, documentos y objetos personales. Los amantes de la poesía y la literatura pueden adentrarse en el mundo literario de los hermanos Bécquer, descubriendo sus obras maestras y su conexión con el Moncayo y sus pueblos. Además, el Museo de la Piedra muestra cómo este material ha dejado una huella imborrable en la arquitectura local.

La ruta nos lleva también a descubrir el Museo del Vino y el Museo del Aceite, dos lugares fascinantes que exploran la tradición vitivinícola y oleícola de la Comarca de Tarazona y el Moncayo. Aquí, los visitantes pueden conocer la historia y el proceso de producción de estos productos emblemáticos. Posteriormente, la ruta sigue hasta el yacimiento celtíbero de La Oruña, un pequeño poblado que estuvo habitado en la Edad de Hierro y que pertenece al término municipal de Vera del Moncayo.

En Trasmoz, ‘el pueblo hechizado’ es un pintoresco pueblo con una historia de brujería intrigante, se encuentra la casa del poeta Gustavo Adolfo Bécquer, un lugar lleno de historia literaria. Además, las fachadas de las casas y edificios municipales en Trasmoz nos recuerdan la influencia de los Bécquer en la cultura local.

El castillo de Trasmoz, en proceso de restauración, ofrece una vista panorámica excepcional del Moncayo, una montaña majestuosa que completa esta apasionante ruta. Los Caminos del alma, opciones senderistas desde Veruela, permiten a los visitantes explorar la naturaleza que inspiró a los hermanos Bécquer. La ruta finaliza en Litago, un pequeño pueblo en las faldas del MOncayo donde finaliza esta ruta, la cual es accesible para todo los públicos. La caminata dura aproximadamente 7 kilómetros y se puede realizar en poco más de 2 horas.

Para los entusiastas del cicloturismo, la zona ofrece rutas señalizadas y consejos para disfrutar de la ruta en bicicleta. También es importante recordar respetar el entorno natural y las normas de conservación durante el recorrido.

La ruta de Bécquer es una experiencia enriquecedora que combina literatura, historia, cultura y belleza natural del majestuoso Moncayo.