Hubo un tiempo en el que el ferrocarril se extendía por buena parte del territorio aragonés, vertebrando el territorio y comunicando pueblos y comarcas tal y como sigue sucediendo en buena parte de Europa. Hoy, el ferrocarril en nuestra Comunidad Autónoma ha quedado limitado a las líneas de alta velocidad y a unas cuantas líneas de tren convencional que subsisten como pueden.

Por el camino, quedaron vías férreas cerradas, muchas de ellas reconvertidas en líneas verdes. Y estaciones que fueron abandonadas y dejaron de recibir el trajín diario de viajeros. Muchas de esas estaciones duermen el sueño de los justos, pero otras, se han reconvertido para dar un nuevo uso a esos edificios.

ESTACIONES DE TREN RECONVERTIDAS

El interior de la estación de Canfranc comparte usos turísticos y hoteleros / Barceló

Si pensamos en estaciones abandonadas que han estado a punto de desaparecer a causa de la desidia gubernamental, la estación internacional de Canfranc es la primera que viene a nuestra mente. Situada en el Valle del Aragón, en el corazón del Pirineo Aragonés, esta estación estuvo abandonada durante décadas tras tener un esplendoroso pasado dentro de la línea internacional entre Zaragoza y Pau.

Fue inaugurada en 1925 como un gran escaparate de nuestro país, pero tras el accidente en la parte francesa de la línea en los años 70, el edificio entró en un estado de abandono que estuvo a punto de llevarlo a la ruina total.

Por suerte, y tras una larga rehabilitación, la vieja y grandiosa estación se reconvirtió en 2023 en un hotel de gran lujo gestionado por Barceló Hotel Group, el Canfranc Estación A Royal Hideaway Hotel. Además, en la explanada junto al hotel hay un restaurante estrella Michelin situado en unos antiguos vagones de tren rehabilitados y con Eduardo Salanova y Ana Acín al frente.

Este hotel del Matarraña ocupa una antigua estación rehabilitada / La Parada del Compte

Desde el Pirineo nos vamos hasta otra de las comarcas más turísticas de la Comunidad, el Matarraña. La estación ferroviaria de Torre del Compte veía pasar trenes que procedían de La Puebla de Hijar con destino a Tortosa desde comienzos de los años 40 hasta principios de los años 70, cuando el derrumbamiento de un túnel en el pueblo de Bot propició su declive.

Tras 25 años de abandono, la antigua terminal ferroviaria de este pueblo del Matarraña se reconvirtió en La Parada del Compte, uno de los hoteles más famosos de toda la provincia de Teruel. La vieja estación fue completamente rehabilitada y hoy acoge uno de los hoteles con más encanto de la zona. También es famoso su restaurante, con una carta basada en la utilización del producto local de Kilómetro 0, utilizado para elaborar algunas de las recetas más tradicionales de esta comarca turolense conocida como la Toscana española.

La vieja estación de Perales de Alfambra tiene una piscina en su interior / Iván García – Google

En la provincia de Teruel tenemos otro ejemplo de estación abandonada que cambió su uso. La estación de Perales de Alfambra formaba parte de la línea Teruel-Alcañiz, una línea que nunca llegó a concluirse. Y tras años de abandono, el ayuntamiento decidió recuperar el edificio para darle un nuevo uso como piscina cubierta, entre otros equipamientos deportivos.

La estación del Norte es hoy un centro cívico / Ayuntamiento de Zaragoza

En Zaragoza, al margen de la vieja estación de El Portillo, todavía pendiente de demolición, tenemos dos grandes estaciones que fueron abandonadas al cerrarse las vías férreas a las que daban servicio. La primera es la Estación del Norte. Situada en el Arrabal, entre las calles Sobrarbe y la Avenida de Cataluña, fue construida entre 1856 y 1861 por la Sociedad del Ferrocarril de Barcelona a Zaragoza.

La estación estuvo recibiendo viajeros hasta 1973, año en que Renfe centralizó el tráfico en El Portillo. Y hasta la década de 1980 esta terminal siguió funcionando para el tráfico de mercancías. Finalmente, la estación fue clausurada, la playa de vías desmantelada, y el edificio fue rehabilitado para funcionar como centro cívico y como sede de Junta Municipal del distrito de El Rabal.

La estación de Utrillas es hoy un centro comercial / Ayuntamiento de Zaragoza

También en Zaragoza nos encontramos con la vieja Estación de Utrillas. Situada en la calle Miguel Servet, esta estación fue construida entre 1863 y 1865 siguiendo las tendencias academicistas de mediados del siglo XIX, y en un principio se le conoció como Cappa.

La planta del conjunto de edificios principales de esta estación configuraba una plaza trapezoidal, con el edificio principal destinado a los viajeros, y dos edificios laterales (uno desaparecido), en los que había oficinas y almacenes.

La estación estuvo en activo hasta 1966. Y la estación estuvo abandonada hasta que la cadena de hipermercados Alcampo instaló en el año 2000 un centro comercial en la estación, integrando los dos edificios dentro del complejo.