El portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, no descarta que su formación entre en los gobiernos de Extremadura, Aragón y Baleares, pero tampoco quedarse fuera, por lo que ha rechazado «especular» sobre los ejecutivos pendientes tras las elecciones del 28M.

«No descarto entrar ni quedarnos fuera», ha señalado este martes el portavoz parlamentario ante los medios de comunicación en la Plaza de las Cortes, en el marco de las negociaciones que su partido mantiene con los de Alberto Núñez Feijóo en las autonomías citadas, donde los dos partidos suman mayoría.

Fuentes de la dirección de Vox en Aragón confirman que cada día que pasa «las exigencias por entrar en un gobierno con el PP se van poco a poco suavizando». Esta apreciación de un alto dirigente de Vox en la comunidad aragonesa se debe a que su peso político no es tan imprescindible como en Extremadura o Valencia, debido a que el peso de Teruel Existe y el PAR es también relevante y su condición para el cambio político en Aragón es que Vox quede al margen de cualquier gobierno.

Este escenario es bien distinto en la región extremeña. La presidenta del PP de Extremadura, María Guardiola, ha retomado la negociación con Vox tras descartar formar un gobierno con ellos hace días. Vox negocia allí «sin límites», pero ha advertido de que planteará sus «justísimas» y «asumibles» reivindicaciones. En los casos de Aragón y Baleares, las conversaciones siguen en marcha.

Sin embargo, y en la línea de las manifestaciones que los dirigentes de Vox hacen estos días, el portavoz ha hecho hincapié en que su formación ahora está en un «momento óptimo» para «ejecutar políticas desde distintos gobiernos y ámbitos», aunque sin dar más detalles sobre si esos ámbitos serían direcciones generales y no consejerías en los ejecutivos autonómicos.

LOS MODELOS A SEGUIR DE VOX

En este contexto, ha abogado por «ponerse de acuerdo en todos los sitios donde hay mayoría suficiente para gobernar» con los de Alberto Núñez Feijóo, poniendo como «modelos a seguir» los acuerdos alcanzados en Castilla y León y en la Comunidad Valenciana.

Sobre el estado de las conversaciones, Espinosa de los Monteros ha reconocido que los ritmos son dispares según territorios: «Más deprisa en unos, donde están más dispuestos, y más despacio en otros, pero sin especular para contribuir al entendimiento». Este «entendimiento» con el PP ha de ser «razonable», ha dicho, aunque ha reconocido que ninguna de las dos partes «quedará enteramente satisfecha».

Por ello, cree necesario que ambos reconozcan la «posición relativa» de «uno frente al otro» para que los acuerdos sean «lo más satisfactorios» para cada parte.