Los hoteles boutique son tendencia en todo el mundo. Con decoraciones cuidadas, mobiliario de diseño, obras de arte en sus pasillos y en las habitaciones, bares rooftop  en las alturas… Estos hoteles se han convertido en una parte importante de la experiencia de ocio en las grandes capitales, ya que son demandados por los turistas que buscan alojamientos especiales, pero también por los habitantes locales para disfrutar en ellos de sus ratos de ocio en sus zonas comunes, gracias a una combinación entre ambiente, diseño y servicio exclusivo.

Suelen ser hoteles pequeños, de pocas habitaciones en comparación con los grandes complejos hoteleros, y con una personalidad e identidad propias, y en muchos casos ubicados en antiguas edificaciones, como un palacio, una mansión o un edificio señorial y con personalidad, como el hotel Don Ramón de Sevilla. Muchos de estos hoteles han sido decorados por interioristas de prestigio, con nombres de referencia como Lázaro Rosa Violán en el caso de los Only You, o Alejadra Pombo en el caso del Don Ramón.

Sus terrazas y restaurantes también se han convertido en una parte importante del ocio para los clientes locales, tal y como sucede con el The Principal de Madrid, o en el Casa 1800, o el hotel EME Catedral de Sevilla, con unas vistas espectaculares de la Giralda.

Y a diferencia del resto de hoteles, ofrecen servicios y atención personalizados: una experiencia total e inmersiva, logrando que a veces sus huéspedes, no quieran salir del hotel por todas las comodidades que ofrecen en su interior. El secreto es que te hacen sentir como en casa, o incluso mejor que en casa.

Los hay independientes y pequeños, o de gran formato que pertenecen a cadenas como los Only You, una cadena con hoteles en ciudades como Madrid, Barcelona, o Málaga, o los Room Mate, con establecimientos en capitales como Madrid, Barcelona, Málaga, Granada o San Sebastián.

Los Petit Palace son otra de las cadenas más conocidas, con hoteles en Madrid, Barcelona, Mallorca, Sevilla, Málaga y Bilbao. Como podemos ver, los nombres de las ciudades se repiten en las distintas cadenas, confirmando que ninguna está presente en la capital aragonesa.

EL CASO DE ZARAGOZA: DOS HOTELES BOUTIQUE LOCALES, NINGUNA GRAN CADENA

A diferencia de otras grandes capitales, en Zaragoza no hay hoteles boutiques de grandes cadenas. A nivel local, recientemente han abierto dos hoteles boutique locales, el Hotel Avenida, y el Hotel Inca; dos hoteles con personalidad y con diseño cuidado que marcan la diferencia con respecto al resto de la oferta hotelera de la ciudad.

Pero no existen grandes cadenas como los Only You o los Cool Room que hayan realizado una apuesta por la capital aragonesa. El motivo viene de lejos. Nuestra ciudad, aunque tiene turismo y los visitantes crecen año tras año, está muy alejada todavía del volumen de visitantes que puede haber ya no en Madrid o Barcelona, sino en Valencia, Málaga, Sevilla o Granada. Eso, resta interés a los grandes operadores del sector por abrir una delegación a orillas del Ebro.

Pero además, Zaragoza es una ciudad de congresos y de visitantes por trabajo, algo que es positivo para la economía y para la restauración de la ciudad. Pero buena parte de los hoteles de la capital están orientados a este tipo de clientes; clientes profesionales que son los que llenan sus habitaciones en el día a día, quitando momentos como puentes, fines de semana, verano, Semana Santa y las fiestas del Pilar.

Este tipo de cliente suele demandar habitaciones cómodas y funcionales, y de precio medio, un concepto bastante alejado del lujo y el cuidado que ofrecen los hoteles boutique, más orientados a disfrutar del relax y de los momentos de ocio.

Tampoco apoya la situación el cliente local. Frente a ciudades como Madrid, donde se ha vuelto a poner de moda acudir a desayunar, comer, cenar, tomar una copa o incluso pagar por ir a la piscina de muchos hoteles, en Zaragoza el público local todavía es reacio a entrar a los hoteles a disfrutar de sus servicios.

Así lo expresaba hace unos días la experta en marketing gastronómico y de ocio, Yolanda Gil, cuando tratamos en HOY ARAGÓN la escasez de rooftops. Según esta experta, «Zaragoza no es una ciudad de consumo interno de hoteles. Se van rompiendo tabúes, pero a mucha gente le cuesta todavía ir a cenar a un hotel».

Hay hoteles, como el Hiberus, del Grupo Palafox, que ha roto esa tendencia gracias a su restaurante Celebris, donde ofrecen espectaculares menús en su terraza con vistas al Ebro y al Pabellón Puente de Zaha Hadid, pero aún así, en la capital aragonesa todavía cuesta entrar a los hoteles en el día a día.