Recientemente, ha surgido un truco viral en redes sociales que propone una forma aparentemente sencilla y económica de evitar multas de tráfico al hacer que las matrículas de los vehículos sean invisibles para las cámaras de velocidad y las cámaras fijas en las ciudades.

El método consiste en adquirir pegatinas que replican el tipo de letra y tamaño exacto de los números de las matrículas. Después de limpiar bien la matrícula del vehículo, se aplican estas pegatinas encima de los números reales.

Estas pegatinas están diseñadas para ser imperceptibles a simple vista pero, según se afirma, vuelven la matrícula invisible para las cámaras de fotos o vídeo.

Aunque este truco puede parecer tentador para algunos, es importante destacar que es ilegal y puede tener consecuencias graves. En España, modificar intencionalmente números o letras de una matrícula constituye un delito de falsificación de un documento oficial.

Este delito está castigado con penas de cárcel que van desde seis meses hasta tres años, además de una multa de 6.000 euros.

Además de las posibles consecuencias legales, el uso de este truco plantea riesgos para la seguridad vial y puede poner en peligro a otros usuarios de la carretera. Las autoridades están atentas a este tipo de prácticas y toman medidas para prevenir y sancionar su uso.